International Airlines Group (IAG) no contempla trasladar la sede de Air Europa fuera de Balears tras su compra, una operación que podría finalizarse a mediados del próximo año.
Tras el anuncio realizado por el grupo a primera hora del lunes, las partes implicadas han declinado realizar valoraciones públicas debido a que IAG cotiza en Bolsa y que la operación está pendiente de la aprobación de las autoridades competentes en materia de Competencia españolas y europeas.
En cualquier caso, fuentes del sector consultadas por este periódico dan por seguro que el objetivo de IAG no pasa por reducir empleos ni trasladar la sede social de Air Europa, que se encuentra en las instalaciones de su empresa matriz, Globalia, en el polígono de Llucmajor. En este sentido, se refirieron a las declaraciones de la presidenta del Govern, Francina Armengol, realizadas el lunes después de hablar con el consejero delegado de Iberia, Luis Gallego, y la directora general de Air Europa, María José Hidalgo, en las que aseguró públicamente que ambos se habían comprometido a mantener el empleo y la conectividad en las Islas.
Air Europa cuenta con alrededor de 3.800 trabajadores en todo el mundo, de los que más de 950 están en la sede de Mallorca y los tres aeropuertos Balears. El secretario general del sector aéreo de USO en las Islas, sindicato mayoritario de la aerolínea en Mallorca, Rafael Bohórquez, aseguró este martes que la compra de Air Europa por parte de IAG ha generado «inquietud e incertidumbre» entre los trabajadores. Sin embargo, están a la espera de las autorizaciones de Competencia.
De todos modos, destacó que en las oficinas del grupo en Madrid se celebró una reunión con los sindicatos, en la que los miembros del comité fueron informados de que la marca IAG quiere mandar un mensaje de tranquilidad porque la «prioridad» es afianzar la posición del grupo en el mercado, garantizar la marca, el personal y los convenios colectivos firmados; así como la permanencia en las bases pequeñas, el acuerdo con Globalia, y la extensión de las inversiones realizadas. El secretario federal de UGT Sector Aéreo, José Manuel Pérez, destacó en declaraciones a Europa Press que ambas compañías garantizaron que se mantendrán todos los puestos de trabajo, así como las previsiones de crecimiento, rutas e incorporación de nuevos aviones.
Todo apunta a que desde IAG se optará por un modelo similar al de Vueling, compañía que adquirió en 2013, y que ha mantenido su sede en Barcelona. La aerolínea de bajo coste funciona de forma «independiente» y «toma sus propias decisiones», según fuentes del sector conocedoras de la operativa. De todos modos, sí que habrá reestructuraciones para reducir gastos para el grupo, como ya se informó el lunes desde el grupo.