Baleares «no se plantea de momento» pedir un toque de queda debido a la situación sanitaria por la pandemia del coronavirus, según han informado fuentes del Govern.
De acuerdo con estas mismas fuentes, en las Islas las medidas han sido «más restrictivas que en otras comunidades autónomas» y «las cifras avalan para seguir haciendo limitaciones controladas que no precisan de toque de queda».
En este sentido, la presidenta del Govern, Francina Armengol, ha anunciado este martes que las reuniones sociales en Mallorca e Ibiza estarán limitadas a seis personas, en lugar de las diez actuales. Según ha apuntado, estas nuevas restricciones se mantendrán «el tiempo que haga falta».
El ministro de Sanidad, Salvador Illa, se ha mostrado este martes abierto a estudiar la posibilidad de decretar un toque de queda como medida para luchar contra el coronavirus, aunque ha avisado de que requeriría de la aprobación del estado de alarma y ha instado al PP a aclarar si contaría con su apoyo en las Cortes Generales.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Illa ha aceptado que el toque de queda, planteado por la Comunidad de Madrid, es una de las posibilidades que puede aprobarse para evitar la propagación del coronavirus y así lo estudiará el Gobierno con todas las comunidades autónomas.