La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha calificado este martes de «chiringuito» la Direcció General de Polítiques per a la Sobirania Alimentària de Baleares, que encabeza el menorquín Aram Ortega. Ayuso ha hecho estás declaraciones en el Debate del Estado de la Región, donde ha defendido el trabajo realizado por la Oficina del Español, que hasta hace pocos días dirigía Toni Cantó, y ha cargado contra los «chiringuitos» del resto.
Ayuso ha afeado a la oposición que se critique la labor de la Oficina del Español en un momento en el que se le está haciendo daño «a España, a la Hispanidad y a lo español en el mundo», y en un momento en el que ahora mismo no se es «la capital solo del español, sino en español». Además, ha defendido su utilidad en un momento en el que «el nacionalismo y el populismo está asolando el continente americano y el proyecto de lo español».
Ante esto, Ayuso ha remarcado, en la Asamblea de Madrid, que con esta Oficina el Gobierno regional quiere trabajar para que cada vez más productoras, empresas, estudiantes y proyectos culturales acudan a Madrid, «que es la casa de todos los acentos para seguir creciendo juntos». «Consideramos que esto tiene un gran potencial y que es importantísimo seguir fomentando festivales como el de la Hispanidad, que tan solo el año pasado confito la ilusión de más de 100.000 personas que fueron a disfrutar en las calles de Madrid» ha declarado.
La presidenta ha considerado que este es un evento del que todos los españoles tendrían que estar «muy orgullosos si no fuera porque los gobiernos de izquierda a lo largo de los años se han acobardado y se han acomplejado de todo lo que España ha hecho por el mundo, negándole a las nuevas generaciones conocer su historia». «Me hablan de chiringuitos a la hora de hablar de la Oficina del Español. Ahora se han vuelto liberales los señores de la izquierda y ahora resulta que les va a importar el uso del dinero público cuando no es de nadie» ha ironizado. En este punto, ha enumerado lo que para ella sí son «chiringuitos».
«Un chiringuito es la Dirección General de Palancas 2030 del Gobierno, o la Oficina Nacional de Prospectiva y Estrategia de País a largo plazo, o la Oficina de la Bicicleta, que fue una PNL del PSOE, o el Consejo Catalán del Fomento de la Paz» ha trasladado. También ha citado los «22 ministerios y 803 asesores de los cuales la mitad pertenecen únicamente a Pedro Sánchez; la Dirección General de Política Lingüística de Aragón; la Dirección General de Políticas para la Soberanía Alimentaria de Baleares» y la Oficina del Consulado Especial para la Alianza por la nueva economía de la Lengua en Moncloa».
Asimismo, ha criticado que el Gobierno tuvo un vicepresidente que «colocó a su pareja de ministra» y que «el presidente valenciano» hiciera «lo propio en su Consejo de Gobierno». «Carmena tenía una radio municipal que costaba cinco millones de euros para 457 oyentes de media y en esta época tuvieron cobijo en el Ayuntamiento familiares de todos. Eso sí, hubo para todos. Ahí fueron comunistas de verdad. Para la alcaldesa, para Maestre, para Alberto Garzón...», ha señalado. Así, ha criticado que la izquierda hable de «ocurrencias» cuando, además, la portavoz de Más Madrid, Mónica García, propuso una «Oficina del Calor» o la de «la dispensadora de cremas para cuando suben las temperaturas». En este punto, le ha recomendado dos oficinas más: «la Oficina del Bulo y la del Tuitero Compulsivo».