La Dirección General de Tráfico (DGT) despliega este mes de septiembre en Baleares una campaña contra las distracciones al volante, que causan el 31 % de los accidentes con víctimas mortales según los últimos datos. Según ha explicado la jefa provincial de Tráfico en Baleares, Francisca Ramis, las distracciones son la causa más frecuente en este tipo de siniestros, seguida del alcohol y la velocidad.
Según los estudios, utilizar el teléfono móvil mientras se conduce multiplica por cuatro el riesgo de sufrir un accidente, incluso si se usa el sistema de manos libres. Al minuto y medio de iniciar la conversación, el conductor deja de percibir el 40 por ciento de las señales, su velocidad media baja un 12 por ciento, se acelera el ritmo cardíaco bruscamente y se tarda más en reaccionar.
«Marcar un número, responder una llamada o un whatsapp, fumar o manipular la radio o el reproductor de CD mientras se conduce implica apartar la vista de la carretera y perder el control del vehículo durante unos instantes», ha advertido Ramis. Este miércoles, la DGT ha llevado a cabo en Palma una acción de concienciación dirigida a los conductores, que desarrolla en colaboración con la Asociación de Lesionados Medulares y Grandes Discapacitados (ASPAYM), para alertar del grave riesgo que supone circular con exceso de velocidad o bajo los efectos del alcohol y otras drogas.
Con este objetivo, se han practicado controles en los que voluntarios de ASPAYM han acompañado a los agentes de tráfico para explicar su testimonio, puesto que muchos de ellos han sido víctimas de accidentes de tráfico. Los expertos sostienen que rebajar en 10 km/h el límite de velocidad reduce en torno a un 10 por ciento la mortalidad en caso de un siniestro, ha recordado la DGT.
El acto ha contado con la participación de la delegada del Gobierno en Illes Balears, Aina Calvo, y del Comandante Jefe del Sector de Tráfico de la Guardia Civil en Baleares, Manuel Aguilera. Calvo ha insistido en que «distracción y velocidad son una combinación sumamente peligrosa al volante, que pone en riesgo no solo la vida de quien conduce sino del resto de las personas que viajan en el vehículo y de otros conductores o peatones». La delegada ha subrayado que reducir al máximo estos factores redunda en una notable bajada de las estadísticas de siniestralidad.