La Confederación de Asociaciones Empresariales de Balears (CAEB) ha mostrado este jueves su «total oposición» a la posibilidad de implantar un impuesto sobre bienes de lujo no productivos en Balears, entre los que se encuentran las embarcaciones de recreo, ya que esto provocaría que sus propietarios buscasen otros destinos donde no se encuentren en vigor este tipo de medidas impositivas.
La entidad patronal considera que este nuevo impuesto, cuya propuesta fue aprobada el pasado 7 de febrero en la Comisión de Hacienda del Parlament balear a petición del grupo Més per Mallorca «perjudicaría claramente no sólo a los puertos que los acogen, sino también al tejido empresarial e industrial de Balears».
«Hay que tener en cuenta que la náutica de recreo es una actividad desestacionalizadora por excelencia. Las embarcaciones recalan en nuestras instalaciones en temporada baja, que es cuando realizan sus trabajos de reparación y mantenimiento, generando mucha actividad a todas las empresas especializadas, como equipos de seguridad, carpintería, electrónica, interiores, recambios…», ha asegurado Andy Halcón, vicepresidente de la Asociación de Instalaciones Náutico Deportivas de Balears (ANADE), integrada en la CAEB.
Halcón también ha hecho hincapié en la importancia que ha adquirido durante los últimos años la náutica de recreo en los espacios que gestiona la Autoridad Portuaria de Balears, donde ya representa el 69 % de sus ingresos.
Fuga a otros puertos
«El impuesto de lujo que quiere implantar el Govern no resultaría efectivo, ya que, a diferencia de otros bienes de lujo, las embarcaciones se pueden desplazar a otros destinos en detrimento de Balears», ha precisado.
La patronal balear ha mostrado su preocupación ante la posibilidad de que el Govern balear ponga en marcha un impuesto en beneficio de otros destinos del Mediterráneo. En este sentido, ANADE ha aconsejado no seguir el ejemplo de otras comunidades, como Cataluña, donde ya se intentó implantar estas medidas impositivas que no funcionaron.