Rachid, el presunto yihadista detenido este jueves en Campos en el transcurso de una espectacular operación antiterrorismo, adelantada en primicia por la web de Ultima Hora, amenazó en las redes sociales a policías, políticos y funcionarios, y trató de adoctrinar a jóvenes para la «lucha contra los infieles». El acusado ha sido trasladado a Madrid para prestar declaración ante la Audiencia Nacional, después de que la Brigada Central de Información descubriera que se encontraba en Mallorca, donde se estaba escondiendo porque al parecer sabía que estaban tras sus pasos.
Los investigadores hacía tiempo que lo tenían en su punto de mira debido a los comentarios extremistas que profería y cuando pasó a las amenazas a funcionarios se estrechó el cerco en torno a él. El miércoles llegó a la Isla, sin saber que todos sus movimientos estaban siendo vigilados de forma estrecha por la Policía Nacional.
En Campos, la detención del presunto terrorista ha causado un gran impacto, porque nadie sospechaba que en la avenida Jaume II podía esconderse un yihadista. Desde la Jefatura palmesana se ha hecho un llamamiento a la tranquilidad, ya que no hay constancia de que tuviera cómplices en la Isla o estuviera preparando actos violentos aquí.