La Conselleria de Mobilitat ha anunciado que revisará uno a uno los 120 pisos que le ofrece el ‘banco malo' antes de comprarlos para evitar que la entidad le intente colocar activos ruinosos o en estado deficiente. La presidenta del Govern, Francina Armengol, también ha asegurado que se analizará uno a uno para ver en qué condiciones están. «Hay que ser muy riguroso cuando se habla de dinero público; haremos lo máximo posible para que sean las máximas viviendas las que se integren al parque público», dijo.
El coste de compra de estas viviendas no está cerrado ya que dependerá de cómo se encuentre cada uno de los activos, a pesar de que desde la Sareb aseguran que esos 120 que se ofrecen al Govern están en condiciones de habitabilidad. De hecho, el Govern tiene en estos momentos una oferta para comprar diez de estos inmuebles. La última adquisición que anunció el conseller hace dos años era para 33 viviendas que rondaban un precio medio de 85.000 euros.
El histórico
La realidad es que, hasta la fecha, solo se ha concretado la compra de 19 pisos a un precio muy superior. En la hipótesis de que el precio medio de los pisos se sitúe entre 150.000 y 200.000 euros, el montante global de la operación sería de entre 18 y 24 millones de euros, a los que habría que añadir el coste de rehabilitación si fuera necesario.
En cualquier caso, en la Conselleria insisten en que se debe ser prudente, pero aseguran que la oferta es positiva porque es mucho más rápido comprar vivienda ya hecha y rehabilitarla que hacerla desde el principio. También señalan que el Govern ya tiene experiencia en firmar acuerdos con la Sareb, por lo que la llegada de estos inmuebles al parque púbico sería mucho más rápida. En vivienda, cada línea suma, aseguran.
Más criticos se mostraron ayer los socios del Govern, que criticaron la oferta envenenada de la Sareb. Antonia Jover (Podemos) opinó que la cesión de pisos a las comunidades autónomas debe ser «gratuita y a perpetuidad». Valora la posibilidad de que la Sareb libere más de 100 pisos en las Islas, pero considera «inaceptable» que la ciudadanía tenga que pagar de su bolsillo los inmuebles del ‘banco malo' cuando el Gobierno estatal asumió la deuda de a entidad. «La ciudadanía ya está pagando la deuda que tenía la Sareb; si la deuda pública es de todos, las viviendas también», señaló.
Críticas de Més
El senador de Més, Vicenç Vidal, coincidió en las mismas críticas que Jover. «Nos han engañado», afirmó el senador al conocer que la Comunitat deberá comprar las viviendas. «En lugar de vender a un fondo buitre, nos las venden a nosotros, así que los ciudadanos pagan dos veces por lo mismo», señaló. Se mostró de acuerdo con el Govern en que los pisos deben mirarse uno a uno para que no haya sorpresas con su estado cuando se reciban.