Era día de partido y las emociones estaban a flor de piel. Un español, de 37 años y vecino del Coll d'en Rabassa, se reunió con sus amigotes para ver el fútbol y cuando quiso darse cuenta llevaba una buena tajada y se había gastado todo el dinero que tenía. ¿Y ahora qué? ¿Cómo se lo cuento a mi mujer?. Pero los problemas aún no habían acabado, al intentar llegar a casa sufrió un accidente de tráfico y destrozó el coche.
Agentes de la Policía Nacional han detenido al protagonista de esta historia acusado de simulación de delito. Los hechos ocurrieron cuando el acusado interpuso en la Policía Nacional una denuncia en la que decía que tras una tarde-noche de fútbol en el bar cogió el coche con dos personas más y, en un momento dado, esos chicos se abalanzaron sobre él, le dieron una paliza y le robaron el coche. La verdad es que desde un principio esa declaración presentaba lagunas importantes, pero los investigadores decidieron dar algo de cancha al denunciante para que entrara en nuevas contradicciones.
Unos días más tarde, la presunta víctima volvió a la comisaría para informar de que el vehículo había aparecido. Acto seguido, el Grupo de Investigación Centro volvió a citar al hombre para que ampliara lo sucedido dado que de nuevo las contradicciones eran más que evidentes. Al llegar a la comisaría y ser interrogado de forma concienzuda e intensa el denunciante se derrumbó y lo confesó todo. Realmente lo que ocurrió esa noche es que se gastó todo el dinero cobrado y de camino a casa tuvo un accidente con el coche. Para evitar que su mujer se enfadara y pusiera el grito en el cielo decidió inventarse la falsa agresión y la paliza recibida. Finalmente, se procedió a su detención acusado de simulación de delito. Por el momento se desconoce si el mal trago del arresto fue peor que cuando llegó a su casa y le tuvo que contar la verdad a su mujer.