«Debemos aceptar las arrugas, no hay que disimular la edad que tenemos»

Con el objetivo de fomentar la salud de las mujeres y hacerlo con perspectiva de género, la autora Mª José Hernández Ortiz anuncia las claves de cómo envejecer saludablemente, especialmente cuando las mujeres son mayores.

¿Cómo surgió su interés por el envejecimiento en mujeres y plasmar este tema en un libro?
—Durante tres o cuatro años estuve haciendo talleres con mujeres mayores por toda la Isla, Envejir en femeni, en los que hablaba del envejecimiento. Me gustó la experiencia y al tener tanto material pensé en escribir un libro. En él hablo de qué es la edad, la importancia social de determinarla, la conyuntura social que han vivido las abuelas en la dictadura y cómo el patriarcado a trasladado a la mujer como objeto de manipulación desde la medicina hasta la iglesia. Y analizar cómo la mayoría están medicalizadas.

Entonces, ¿es una especie de crítica?
—Es una crítica, pero no solo al sistema con el que parece que solo se pueden tratar las cosas con fármacos. Tampoco consiste en considerar que la medicina no es útil, lo es, se trata de que no puedes tener a personas mayores con cinco fármacos diarios.

¿Qué significa reivindicar la palabra vieja en el título?
—En el libro hablo mucho de Ana Freisas. Ella tiene el libro Yo vieja y habla sobre los aspectos sociológicos y psicológicos del envejecimiento y como admiradora quería usar la palabra viejas para reivindicar lo que se percibe como un insulto. Y decir, soy una vieja pero estoy encantada de serlo. Me siento estupendamente y estoy muy satisfecha con lo que he vivido.

¿Qué visión ofrece ‘Orgullosamente Viejas?
—En este libro, propongo asumir nuestra salud pronto, porque de esta forma se puede intervenir en la forma en la que envejecemos, pero no podemos evitar envejecer.

En el libro habla de la aceptación y preparación para esta etapa, ¿cómo se pueden combinar?
—El envejecimiento es rechazado actualmente debido a los estereotipos de belleza. Debemos aceptar las arrugas en la cara, no hay que disimular la edad que tenemos. Hay que celebrarla, tener ganas de vivir y seguir teniendo propósitos. La reivindicación

¿Qué valores aportan las mujeres mayores a la sociedad?
—Muchos. La reivindicación última del libro es colocar a las mujeres en su sitio. Las mujeres mayores tienen una visión más global del mundo y de lo que está pasando. La idea también es que nos dejen expresar lo que queremos y devolverle a la mujer su lugar en la sociedad.

¿Cuál es el mayor mito?
—Que el envejecimiento es decadencia. Hay que mantenerse. Existe gente muy mayor que tiene un cerebro espectacular. Con respecto a la salud, tendríamos que investigar más en modelos en positivos.

Por ejemplo con respecto a la capacidad cognitiva
—Con la edad nos encontramos con el declinar cognitivo, pero no es constante. Con la investigación me refiero a averiguar cuáles son las cualidades de las personas que conservan sus capacidades mentales intactas.

También, la menopausia asociada al envejecimiento sigue siendo un tabú.
—Aunque no es el tema del libro, es cierto que la menopausia es el comienzo. Pero planteo que puede ser un momento estupendo para descubrirse y observar lo que quiero, necesito y cambiar el foco. Luego, además, la gente es cada vez más agresiva, sobre todo queriendo que las mujeres tomemos terapia hormonal. Esta es la gran lucha medicalizadora. Hay un porcentaje de mujeres que se pueden beneficiar de la terapia, pero lo que se pretende es que la mujer por el simple hecho de ser mujer y llegar a la menopausia, tome esta terapia hormonal. Como si la menopausia no fuera una etapa normal y fisiológica.

¿Qué hábitos para envejecer saludablemente recomienda a una mujer que está en sus 50 para que no deje de cuidarse?
—Hay un programa de autocuidado en el libro: La importancia de crear un programa personal de autocuidado. Y si no lo has tenido a lo largo de tu vida, diría que ahora es un buen momento para pararse y pensar qué necesito.

¿Cree que la vejez no es solo biológica, sino también social?
—Sobre todo social, le prestamos mucha atención. Por algún motivo la edad es un hito social muy importante. En un capitulo hablo de que hay muchos tipos desde la cronológica o la biológica.

¿Hay alguna frase con la que le gustaría que sus lectoras se quedaran que también le ayudo a usted?
—Hay muchas referencias bibliográficas, he intentado que sea un libro científico. Aparecen muchas frases de mujeres feministas, por ejemplo de Carme Valls, mi principal referente. [Tras pensarlo unos largos segundos, finalmente elige una]. «El objetivo de tratar personas sanas se incardina en una cultura desarrollada en Occidente que considera los medicamentos, sean el tipo que sean, como fórmulas para soportar la incertidumbre de lo que pasará y para superar la angustia frente a lo desconocido [...]»