Este Menorca Bàsquet llamado a tener uno de los papeles protagonistas de la Adecco Oro ha iniciado la competición con la asignatura pendiente de aumentar la faceta defensiva, lo que le ha hecho sufrir demasiado a pesar de ganar -Clínicas Rincón aparte, el otro día venció al Knet&Eniac in extremis - o, directamente, perder.
Los dos partidos que ha perdido han sido fuera de casa, y en ambos encajó tanteos altos. Ocurrió en la primera jornada ante Breogán (87-86) y, sobre todo, en Inca ante el Logitravel (100-91), en un partido en el que el técnico Berrocal ya dio el aviso en la previa de que el rival "no debía llegar a 100 puntos".
Esta tarde a partir de las 19 horas en Fontajau y ante el Sant Josep Girona FC, el Menorca Bàsquet tiene una nueva oportunidad de mostrar que va mejorando en esa faceta. En la otra, en la atacante, parece que evoluciona correctamente. Además, vencer significaría lograr la primera victoria fuera de casa para un equipo que, hay que recordar, todavía está en rodaje de piezas.
Delante, un histórico CB Sant Josep Girona con una plantilla "apañada" que presenta números similares y el mismo balance de victorias y derrotas que los menorquines (2-2). Será un partido de caras conocidas para ambos: David Navarro vuelve a con Menorca a la pista donde jugó las temporadas 2009/10 y 2010/11 hasta su salida a Valencia, y Marc Fernández, que recibirá con su nuevo equipo gerundense al que fuera su equipo entre 2008 y 2010. En el Girona, además, un histórico incombustible, el ala-pívot Darryl Middleton (45 años y ahí sigue) y un técnico con largo currículum como jugador pero debutante en los banquillos: Zan Tabak.
Y ante todo ello, el conjunto de Josep Maria Berrocal. El técnico no rehuye el análisis general. Más defensa. "Es una cuestión de deseo y de saber hacerlo. Hay que tener buenos conceptos y unos hábitos que no tenemos y que debemos conseguir. Lo sabemos y lo vemos en los entrenos". Claro y directo el técnico barcelonés.
"El ejemplo que le he puesto al equipo es que somos los segundos en anotación y valoración en el aspecto ofensivo, pero llevamos dos derrotas. Y es simple: porque no defendemos. Hacemos errores que dan al rival la oportunidad de meterse en el partido". Más claridad, imposible.
Esa es la receta para ganar hoy. Defensa. "Son situaciones de responsabilidad individual, de despistes, de querer hacer más de lo que toca... Y evidentemente llevamos poco tiempo", reconocía un Berrocal que también significaba que Coppenrath "no ha entrenado durante toda la semana y veremos si nos puede ayudar. A ver si hoy (por ayer) entrena un poco". El americano ha seguido esta semana un plan individual para intentar paliar sus problemas de espalda.
El técnico también explicó que no le gustaría "llegar a un marcador ajustado" en Girona. "Llegar a un cara o cruz porque ambos jugamos al límite, bueno. Pero por otro motivo, no. Hay que ser más constantes, más regulares, evitar llegar a ese final".
Su opinión del rival de esta tarde es que "es un equipo completo, con buen equilibrio interior-exterior, que combina veteranía y juventud... Es un buen equipo. Están jugando bien y plantaron cara al Burgos incluyendo prórroga (perdieron 83-78) y ganaron bien al León... Tienen jugadores con talento, en una liga muy igualada".
Y dos cracks como Middleton y Tabak. En el primer caso, "es algo extraordinario. Le gusta lo que hace. Es el tipo de veteranos que vive el baloncesto, es su vida. No para nunca. Su ilusión es un ejemplo para todos". En el segundo, "lo conozco de nuestra relación en ACB, cuando estaba en Madrid y Sevilla, y el año pasado coincidimos cuando jugamos contra ellos en la Eurocup con el Budivelnik. Hay cordialidad".
Y la obsesión. El partido. "Hay que romper etapas. Se trata de ganar fuera y lograr la segunda victoria consecutiva. Estamos preparados para ganar mañana (hoy) en Girona".