Sergio Llull Melià (Maó, 1987) es cada día más legendario. El base menorquín del Real Madrid, en la victoria conseguida por el Real Madrid en la noche del miércoles sobre el Bilbao Basket (83-85), además de contribuir con los 14 puntos que anotó a que el conjunto blanco conserve el invicto y el liderato en la Liga Endesa (9/0), se convirtió en el segundo máximo anotador histórico del club blanco en la competición ACB.
Hasta la reciente velada de Bilbao –precisamente idéntica ciudad y rival ante el que Llull, en enero de 2006 y jugando para Manresa, disfrutó de su bautismo en la liga española–, ese honor correspondía a otro mito de la ‘Casa Blanca', el exescolta hispano-ruso José ‘Chechu' Biriukov, un clásico del Madrid durante los años 80 e inicios de los 90, y que a su retiro en 1995 dejó una marca en la ACB de 5.311 puntos anotados, que Llull dejó atrás al alcanzar los 5.322, registro obviamente susceptible de ser ampliado a muy corto plazo. El pívot Felipe Reyes, aún compañero de Llull en la plantilla del equipo que dirige Pablo Laso, gobierna la clasificación histórica de anotadores del Real Madrid, con 6.001 puntos, y que totaliza, sumando su presencia en Estudiantes, 8.318, igualando con Juan Carlos Navarro como cuarto anotador en la cronología de la liga (contando la estadística a partir de 1984).
Alberto Herreros encabeza el ránking ACB con 9.759 puntos (y es cuarto del Madrid, con el que se fue hasta los 4.615), Jordi Villacampa es segundo (8.991) y otro exmadridista, el norteamericano Brian Jackson, es tercero con 8.651.