El Hestia Menorca vivió un intenso fin de semana en lo que a su proyecto social se refiere. Pol Molins, jugador del Hestia formado en las categorías del Joventut de Badalona, se desplazó a Ciutadella para asistir al Campus Urban Experience que organizan el CB Boscos y la Penya. El evento congregó una semana a 120 jugadores/as de clubes de Menorca, a las órdenes de los técnicos de la cantera ‘verdinegra', Dídac Arredondo, Gerard Jara y Roger Marcos, junto con entrenadores locales, disfrutando así de jornadas de aprendizaje y convivencia. En su paso por el Campus, Molins contestó a las múltiples, y en algún caso, atrevidas, preguntas de los asistentes, además de participar en la entrega de premios del torneo.
La presencia del masnouense en el Campus Urban Experiencie es consecuencia del acuerdo de vinculación que une a Hestia y Boscos, y del compromiso del club de Bintaufa con el baloncesto de formación de la Isla. «Estuvo muy bien, vi muchas caras conocidas no solo de Ciutadella sino también de Maó, del Alcázar, por ejemplo, y la experiencia estuvo bien, con la Penya, que yo vengo de allí», explicó Molins, quien apuntó a la «competitividad» como principal diferencia entre esa cantera y los clubes menorquines. «Hay diferencias pero también similitudes. Allá hay muchos más niños, entre los que puedes elegir a la hora de hacer el equipo, y eso eleva el nivel, supongo. Aunque esta es una isla de básquet y hay mucho talento. Ya se sabe que Balears ha dado grandes jugadores», concluyó el base.