El Sporting Mahonés se quedó a once metros de los cuartos de final de la Copa Federación. El espacio que separa el punto fatídico de la portería. Pero quiso el destino que el héroe del partido de ida se convirtiera en villano ayer. Eloy, el portero, erró el cuarto lanzamiento en la tanda de penaltis definitiva y Septien ajustició a los de Joan Esteva en un partido que no tuvo demasiada historia y que se hizo eterno.
La tarde se enfrió por momentos en Maó. La lluvia fue la última en llegar al municipal de Bintaufa pero afortunadamente no debió gustarle lo que vio y se marchó al poco de empezar. El Sporting Mahonés tiñió pronto el partido de azul coraje con dos goles muy parecidos de Mario Mora, en el minuto 17 y en el 21, pero la alegría por la remontada se vio desteñida por el gol, tras errores en cadena, de Gaviro. Por partes.
El Sporting impuso, en los minutos iniciales la lógica superioridad sobre el césped. Tomó el balón y cortó cualquier oportunidad de un Almansa que se presentó al partido con 12 jugadores disponibles y con un aspecto muy ofensivo. Pero las buenas noticias no tardaron en llegar. Mario Mora aprovechó la tercera ocasión que tuvo, a pase de Fullana por la derecha, para fusilar a Toni, en el 17.
En el 21, jugada idéntica pero con pase que dio Libo, Mora justificó su titularidad con otro potente disparo para el que Toni sólo pudo sacar el balón de la red. Cuando el público todavía lo estaba celebrando y los más optimistas pensaban en una goleada, Gaviro, con una falta escorada y desde 30 metros, sorprendió con un centro que se fue cerrando y que incomprensiblemente acabó en el fondo de las mallas. 2-1 y eliminatoria empatada.
Lo peor para el conjunto de Joan Esteva fue que el gol visitante reanimó al Almansa que plantó cara y tuteó a un Sporting que presentó a una defensa inédita. Prueba de ello, chut de Pifarre desde el centro del campo que sorprende a Eloy, aunque despeja a córner. En el 33, Trujillo dio un pase precioso a Mora que no controló bien y que Toni salvó en el cara a cara.
La segunda parte apenas tuvo ocasiones, salvo un pase de Nil a Lluís, ambos del Penya, que se fue por la derecha, cuando el tiempo ya estaba cumplido. Ya en la prórroga, el Sporting apretó más, incluso buscó la victoria, pero fue el Almansa quien tuvo la mejor ocasión, a pocos minutos para llegar a los penaltis con una falta de Omar dentro del área que supuso su segunda amarilla.
Pifarré, desde los once metros, envió el balón a las nubes mahonesas para delirio del personal de Bintaufa. Pero una vez en la tanda definitiva, como ya pasó en la eliminatoria de la Copa del Rey frente al Alicante, se perdió. Los almanseños estuvieron impecables y Eloy, en su disparo, optó por tirar al centro. Toni acertó y salió cruz.
Esteva: "Lo lamento, hemos jugado a un nivel muy alto"
El entrenador del Sporting Mahonés Joan Esteva confesó estar "muy contento con todos los jugadores que han estado sobre el terreno de juego, tanto los del Sporting como los de la Penya, porque han jugado a un nivel muy alto pero también estoy triste porque han hecho un buen partido y merecíamos pasar la eliminatoria". El catalán lamentó que "no sentenciáramos con los balones a la espalda que tanto daño les han hecho en el principio" y admitió que "el gol de falta que nos han hecho les ha metido en el partido". "Nos hemos quedado en los penaltis, como en la Copa del Rey, tras un buen partido", valoró el técnico, que añadió que "me sabe mal porque es una competición que daba la oportunidad a los jugadores que tenían menos minutos, así como a los de la Penya Ciutadella".
Con todo, el entrenador admitió que tras el partido el pensamiento está únicamente en el partido del domingo contra el Vila Joiosa.
Payá: "Nos lo merecíamos"
El entrenador del Almansa, Chema Payá, admitió que "hemos sido superiores, salvo en los primeros 20 minutos por lo que creo que nos lo merecíamos". Un aspecto negativo que destacó el preparador fue el arbitraje: "Creo que ha sido uno de los más caseros que recuerdo". Con todo, admitió que los penaltis fueron una lotería pero que su equipo se lo merecía.