Después de tres jornadas sin conocer la derrota, el Sporting Mahonés volvió a la cruda realidad. Los hombres de Joan Esteva perdieron un partido ante un rival que luchará por evitar el descenso de categoría. A los mahoneses les faltó suerte y, sobre todo, mucha puntería, ya que dispusieron de buenas oportunidades para conseguir un mejor resultado en el Joan Baptista Milà.
El Sporting encajó dos de los tres goles, de penalty, y Méndez marcó el único de su equipo, también desde el punto fatídico.