J. J. Ortega es representante de jugadores, lo que se denomina un Agente FIFA. Esta semana ha hecho un buen negocio: uno de sus representados, el mercadalense Guillem Martí (26 años, 1'81 metros, ex Alaior, Sariñena, Zaragoza B, Sporting Mahonés en dos etapas, Igualada y Terrassa), ha renovado por dos temporadas más por su actual equipo, el SV Ried de la Bundesliga de Austria.
"Es un chico que por su trabajo, su seriedad y su ambición, se ha metido al club en el bolsillo. Al principio tenían dudas, pero ya no", asegura Ortega.
Lo que empezó siendo una aventura el pasado verano, como ocurre con tantos jugadores que prueban suerte fuera de nuestras fronteras, con desigual fortuna, puede empezar a ser una fructífera carrera para Guillem, que actualmente se encuentra con su equipo en un stage en Belek, en la Anatolia turca: la Primera División austríaca está en el parón de invierno, lo que es aprovechado por los equipos para seguir con su preparación física en climas más temperados hasta la reanudación del campeonato.
"Los números de Guillem son muy buenos. En dieciocho partidos jugados, ha marcado ocho goles. Está entre los mejores registros de la liga. Teniendo en cuenta que debuta en un fútbol diferente, en un país diferente con el hándicap del idioma, no sólo no está nada mal sino que es muy bueno", tanto que "hemos recibido llamadas de equipos como el Rapid de Viena en la misma liga austríaca o dos alemanes como el Hamburgo o el Eintracht Frankfurt", asevera el agente.
La evolución de Guillem y el interés de esos equipos de postín ha llevado al SV Ried a asegurarse. Renovándole el contrato obliga a los interesados a tener que negociar un traspaso. En Austria, como en la mayoría de países de la UE, no existe la cláusula de rescisión como en España.
En cualquier caso, Martí está indicando que, si sigue así, puede ser otro de los deportistas menorquines en la élite. En este caso, el fútbol. De momento su equipo es el líder con 37 puntos, por encima de clásicos como Salzburg, Austria Viena o Rapid. Quizá en Es Mercadal empezarán a conocerle pronto como "en Guillem d'Àustria".