CE Alaior y CE Ferreries, inmersos de lleno en la lucha por la permanencia en Tercera División se hallan a expensas de lo que suceda tanto con los equipos de Balears que desciendan de la Segunda División B como con los que puedan ascender a ella en el play-off que se iniciará al término del campeonato.
Confirmado el descenso del Mallorca B, está claro que el cuarto clasificado por abajo también descenderá a Regional empujado por el equipo mallorquinista. Esa es la plaza que intentan eludir Alaior, Ferreries y Ferriolense, principalmente, los tres empatados a 38 puntos, aunque dado que quedan 9 puntos en disputa, todavía están afectados desde el Mercadal (45) hasta el Felanitx (39). La situación se agravaría para los afectados si el Sporting Mahonés también perdiese la categoría de Segunda B puesto que empujaría al quinto clasificado por abajo.
Los equipos que se vean perjudicados por estos descensos compensados, sin embargo, dispondrán de otra oportunidad para salvar la categoría aunque deberán vivir con la incertidumbre durante varias semanas más. Y es que si alguno de los cuatro equipos de baleares que va a disputar el play-off de ascenso a Segunda B consiguen el salto a la división superior, dejarán su plaza, precisamente, a los equipos que la hayan perdido por culpa del descenso del Mallorca B, y si se diera el caso, del Sporting Mahonés.
La normativa para compensar estos posibles ascensos con los descensos de Tercera a Preferente fue modificada hace dos temporadas por la asamblea de la Federación de Fútbol de les Illes Balears. Hasta entonces las plazas de los ascensos de Tercera a Segunda B se cubrían con equipos de Regional Preferente ocasionando así, el injusto descenso de los conjuntos que habían sido desalojados de Tercera por los equipos que habían bajado de la Segunda División B al término de la temporada.