El Platges de Calvià se topó con un premio desmesurado (1-0) dada su racanería en cuanto a ocasiones en el partido de ayer cuando en el minuto 94 González batió a Cristian con una semi vaselina en la única opción que tuvo el equipo de José Gálvez. Pero la felicidad local pudo verse truncada en la siguiente acción ya que el Mercadal tuvo dos balones en la misma jugada que acabaron repelidos por el palo. En el primero un remate de Adri lo rechazó el póster y Pulido puso un centro chut que rebotó contra el larguero y se marchó fuera. Final movido para un partido que dominó el Mercadal, acreedor de un empate como mínimo.
El encuentro arrancó con un Mercadal atrás, superado en las circunstancias en las que no tenía balón. Los mallorquines, en un estado de forma mejor que los rojiblancos, hacían circular el esférico aunque sin inquietar la portería de Cristian. Cuando el Mercadal logró sacarse de encima la presión, empezó a crear peligro.
Robert Pulido tuvo el 0-1 a los 24 minutos en una acción en la que prácticamente sólo ante la portería envió su remate fuera cuando parecía que lo más difícil era fallar. Con todo, el equipo de Yeray Rodríguez se rehizo y siguió comandando en la posesión y en el juego. Los rojiblancos tuvieron algunas ocasiones más para abrir el marcador mientras los locales permanecían cerrados.
Pero la sorpresa saltaría en el polígono municipal de Magaluf ya que cuando se cumplían los cuatro minutos añadidos por el árbitro Escribano Jiménez, González cazó un balón a la espalda de la defensa del Mercadal e hizo el 1-0. Tras el saque del centro, el Mercadal gozó de una doble ocasión pero la suerte cayó del otro lado y el Mercadal volvió a la Isla de vacío.