Sin duda, Marc Seguí y Pau Riudavets, han recibido el mejor regalo de Reyes. Ni una motocicleta, ni la última videoconsola, ni la camiseta de Víctor Valdés. A sus 17 y 16 años, respectivamente, los dos porteros del juvenil del Sporting Mahonés darán el salto de su vida y defenderán, por el momento, la portería en Segunda B. Un reto que asumen con ilusión, con algunos nervios pero sin miedo. "Llego a la categoría un poco de rebote pero estoy muy contento y si se da la oportunidad estaré satisfecho aunque me sabe mal por el club", apunta Seguí el, a priori, titular por ser mayor. Riudavets no duda en afirmar que "este salto lo veo demasiado rápido pero lo afronto con muchas ganas porque hace unos meses era impensable". La ilusión, por bandera.
La marcha de Eloy Casals y Oliver Sánchez, que precisamente regresará el domingo con su nuevo equipo, el UE Llagostera, sumado a la prohibición de fichar que pesa sobre la entidad blanquiazul hasta que no esté al día en cuanto a los pagos, ha abierto una puerta a estos dos jóvenes con los que muchos sueñan. "Estoy nervioso, lo normal cuando uno está jugando con el juvenil y le dicen que la semana que viene lo hará en Segunda B, pero estoy más contento que nervioso", explica Marc Seguí, un chico que lleva once años en el Sporting y que reconoce que "si ya parecía difícil que pudiera jugar con el juvenil porque hasta hace poco no había, imagínate hacerlo con el Segunda B, es algo que nunca me había planteado...". Riudavets admite que "la situación en el club está mal pero en realidad es una oportunidad para la gente de aquí" y matiza que "el titular sé que es Marc, con el que me llevo muy bien, pero si tengo la opción de jugar intentaré aprovecharla" porque "a lo mejor nos ve alguien pero lo importante es que seremos como esponjas, intentaremos absorber todo lo que nos enseñen porque será una ventaja para nosotros cuando regresemos al equipo juvenil".
Marc Seguí, que esta temporada ya disputó la final de la Copa juvenil con el Sporting Mahonés y que perdió por 0-3 contra el Sporting Mahonés, cree que "para mí ir convocado ya era un premio porque me permitía viajar con el equipo y convivir con ellos, pero nunca me hubiera imaginado que me tocaría jugar". Ante la cita del domingo al mediodía, el mahonés sabe que "no tengo que hacer más de lo que sé".
Los dos guardametas ya conocen al que será su nuevo vestuario porque participaron en la pretemporada a las órdenes de Luis Elcacho. "Son muy buena gente, nos animan mucho en los entrenamientos y hacen que nos adaptemos con facilidad" matiza Riudavets, que asegura que conoce muy poco a Mati Borsot. Por su parte, Marc Seguí cuenta con más experiencia ya que la lesión de pómulo que se produjo Eloy Casals propició que entrara en algunas convocatorias antes del parón navideño. "Siempre me ha gustado Víctor Valdés y con el paso de los años he ido fijándome en él", asegura.
Seguí muestra prudencia y serenidad ante el estreno del próximo domingo. "No se si seremos un referente, la realidad del club es triste, ha habido una mala gestión y se nos han abierto puertas que hasta ahora estaban cerradas. No sé si el fútbol base estará pendiente de nosotros y de si jugamos pero sí que quiero animarles a que trabajen duro porque nunca se sabe...".