Javier Zurbano, el mejor jugador de la tarde, y quien con su actuación desequilibró la zaga local, dio ayer la victoria al Penya Ciutadella en el campo del vicecolista, Montuïri, al materializar el tanto del empate a los 50 segundos de la segunda parte y ceder en bandeja el de la victoria. El cuadro ciutadellenc, que venía de ganar al Mercadal, enlaza así su segundo triunfo consecutivo que asea su clasificación lejos de la zona más peligrosa.
El Montuïri, que mereció el empate, desaprovechó claras ocasiones de gol, tres de Marc, Adrià y Said, con el 1-1 en el marcador, y otra de Said en el minuto 93, a la que un seguro Sastre respondió con un soberbio paradón.
Los locales empezaron bien el partido pero perdieron el dominio en el centro del campo que pasó a manos del Penya. La movilidad de sus atacantes -que chutaron mucho a puerta, aunque no siempre con peligro- les dio la victoria en dos jugadas que tuvieron lugar dentro del área pequeña.
En los primeros compases del partido, el equipo de Dani Mori dio grandes facilidades en defensa y, poco después del 1-0, obra del local Javi, pudo haber encajado el segundo gol al estrellar el mismo jugador un balón en el larguero en el minuto 16.
En el ecuador del primer tiempo el Penya cogió la batuta en la zona ancha del campo lo que le permitió realizar un final de este primer periodo con juego de excelente calidad.
La segunda parte resultó muy animada con dos equipos lanzados en pos de la victoria y en la que el Penya -con su zaga más segura y expedita- supo sacar provecho de su mejor juego frente a un Montuïri, desventurado, que actuó embarullado y con falta de acierto en los momentos decisivos para evitar el triunfo ciutadellenc.