La fiebre ha bajado y el paciente está mejor. Anquela, muy cuestionado por los aficionados del CD Numancia, de la Liga Adelante, respira, en buena medida gracias al anhelado reencuentro con el gol del delantero ciutadellenc Sergi Enrich. Después de cinco jornadas consecutivas sin conocer la victoria, el equipo soriano, en zona de descenso, rompió la racha negativa en el Nuevo Colombino y venció al Recreativo por 0-3 con un doblete de Enrich, jugador al que el técnico volvió a colocar solo en la punta de ataque y éste le respondió con dos dianas de bella factura.
Tras salvar, de momento, la cabeza de su cuestionado entrenador, Enrich pidió disculpas a la que fue su antigua afición por los goles. El ciutadellenc, sin embargo, cometió en el minuto 90 el feo gesto de golpear a Montoro sin balón tras una provocación de éste, y fue expulsado. «Pequé de tonto, pero son experiencias y de todas se aprende», decía ayer a «Es Diari», arrepentido.
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Sergi, es un buen jugador desde niño así lo apuntaba y se comportaba como un profesional y merece estar mucho más arriba solo se casan los que tienen padrinos.