El modesto CE Campanet, equipo séptimo clasificado de la Primera Regional de Mallorca y que lleva cuatro años tan sólo en esta categoría, es el primer obstáculo que deberá lidiar el CE Ferreries en su camino hacia el anhelado retorno a la Tercera División. En el sorteo celebrado ayer al mediodía en la sede de la Federació Balear de Futbol los de Pere Vadell quedaron encuadrados con el equipo dirigido por Mateu Ripoll y con Esporles y Cardassar, la otra eliminatoria del Grupo II. La ida se jugará probablemente este sábado en la menuda localidad mallorquina de 2.500 habitantes, en un pequeño feudo en el que todavía le están construyendo su primera grada cubierta. La vuelta, la próxima semana en el Municipal de Sant Bartomeu.
Una lotería para el pueblo
En Campanet han acogido la clasificación para la Fase de Ascenso a Tercera con entusiasmo ya que es la primera del club y de muchos de sus jugadores. Joan Amengual, jugador de toda la vida del Campanet, capitán del equipo y secretario del club, admite que para entidad y pueblo es «una bomba, un premio estar aquí. Siempre hemos jugado en 2ª Regional y este año la idea era la salvación y punto pero la temporada ha salido bien y aprovechamos. Ya el año pasado quedamos a un punto», decía ayer, tras reconocer que de momento saben poco del campeón de Menorca. Equipo con base de jugadores locales y sin sueldo alguno, tiene a su pueblo volcado, siendo una afición ruidosa y ahora emocionada con esta fase. Entre la plantilla destaca el veterano 'cerebro' de 44 años, Vicent Reynés, exBaleares o Binissalem. Destacan también Toni Capellà (polivalente) y Jaume Aguiló (central), ídolos del pueblo. Y el punta, Toni Martorell.
¿Y a qué juega el Campanet? El mismo Amengual reconoce que su filosofía es la de «intentar salir al contraataque y sorprender, jugando bastante replegados atrás ya que este año la liga ha sido muy potente en Mallorca», explica el capitán 'campaner'. Un rival del Ferre repite, se toma la fase como un premio «y sin presión. Hemos hecho historia y hemos cumplido». Aunque avisa: «Ahora estamos y saldremos a competir pero sin presión y ni pensamos en Tercera. Gustaba 'caer' en Menorca y vamos a disfrutar el debut de muchos de nosotros en una 'liguilla'».