El fantasma del descenso gobierna desde hace semanas la realidad competitiva del Mercadal y el Penya Ciutadella de Tercera División. El paso de las jornadas ha acrecentado las peores expectativas pese a que el conjunto de Sant Martí nunca ha residido en la zona fatídica y que el equipo de Son Marçal se resiste a dar su brazo a torcer y protagoniza una notable segunda vuelta en relación al primer tramo del calendario.
Sin embargo, hay un factor añadido que condicionará el desenlace de la competición y el número inicial de plazas -tres- que sentencian a sus moradores a la categoría de Regional Preferente. El futuro de un club de Tercera está en manos del Real Mallorca de Segunda División A, penúltimo clasificado, con 33 puntos, a falta de siete jornadas para agotarse el calendario y actualmente a ocho puntos de la permanencia.
El hipotético descenso del primer equipo de la centenaria entidad mallorquinista desencadenaría que el filial de Segunda B bajara directamente a Tercera y remitiría a Regional al decimoséptimo clasificado del campeonato balear. Posición que ocupa el Mercadal.
El futbol menorquin esta mal dirigido,hace falta que los clubs se organicen con una asociación para defender calendarios,viajes y muchas cosas mas,hoy por hoy los clubs no pueden pagar a todos los entrenadores de la cantera esto debe volver a los años cincuenta y sesenta que se entrenaba por amor a unos colores o por pura afición la verdad es que salian mejores jugadores que en la actualidad,otra cosa a mejorar son las tarjetas que enseñan los arbitros por autenticas tonterias,esto tambien sangra a los clubes,los arbitros y los entrenadores que cobran tambien deben parar su entrada cuando van al futbol como espectadores,todo esto lo pueden conseguir los clubs si van unidos,los directivos lo unico sano del futbol les cuesta tiempo disgustos y dinero.