El equipo juvenil de Liga Nacional del Atlético Villacarlos ha sido distinguido y recibió este sábado, por segunda vez en las últimas tres temporadas, el galardón de su categoría correspondiente al Torneo de la Deportividad. Un premio impulsado por Ana Huertas y organizado por el Grup Serra en colaboración con Banca March, que alcanza su vigésimo tercera edición.
La promotora del evento se desplazó expresamente a Es Castell para hacer entrega de la distinción en el transcurso del acto del cierre de la temporada del club que preside Joan Quevedo, un gesto que realiza con especial «orgullo y satisfacción» por la vinculación personal que la une al municipio. Huertas destacó que al margen de «su» trofeo, nueve equipos del club gualdiazul han ganado la deportividad de las competiciones de la Federació de Fútbol de les Illes Balears (FFIB).
Sin embargo, el Torneo de la Deportividad se rige por unos baremos que van más allá de las tarjetas propias de los partidos. «Ejercemos de árbitros del comportamiento», apunta. «Este año incorporamos puntuaciones en función de la conducta del público, técnicos y directivos; queremos evitar que se repitan episodios tan tristes como los del año pasado», en relacion por ejemplo a la batalla campal que se organizó entre padres de equipos infantiles del Alaró y del Collerense.
Ana Huertas destaca la labor en pro de la deportividad del Real Mallorca, «pese a figurar en la élite balear casi cada año tiene un equipo distinguido».
Al margen, el Villacarlos despidió el curso y a cuatro juveniles que abandonan la entidad: Adri Mercadal y Simón Vidal, fichados por el Mallorca, Manel Vinent que marcha a estudiar a Barcelona y Fran Vico, que concluye su ciclo.