Las competiciones se deciden en mayo pero en los meses anteriores es cuando realmente muchos equipos encuentran el camino correcto o se quedan lejos para alcanzar sus objetivos mientras llega el final de temporada. En estos meses de enero y febrero, el Mercadal afronta un exigente calendario que le indicará si llegará al rush definitivo en condiciones de pelear por la supervivencia en la liga doméstica.
En este espacio de tiempo y a la vez duro inicio de segunda vuelta que se abrió el pasado domingo frente al Formentera, el conjunto rojiblanco se medirá a seis conjuntos del ‘top ten' de la competición, a dos de media tabla y a un solo rival de su particular liga. Nueve partidos (cinco en casa) antes de llegar a la jornada de descanso, el diez de marzo, y de comenzar a medirse a rivales más asequibles. Ante estos rivales a los que se enfrentó en la primera vuelta, el Mercadal solo sumó dos puntos (Formentera 0-0 y en terreno del Santanyí, 1-1). Repitiendo estos parámetros, la salvación sería una quimera. Al conjunto de Pere Vadell no le queda más remedio que aparcar la identidad del contrario e intentar sumar de tres en tres desde ya.
Tras el duelo ante el Formentera, el próximo objetivo de la escuadra de Sant Martí es el rocoso Felanitx que aterriza mañana en la Isla. En la próxima jornada, el Mercadal repite en casa recibiendo al Platges de Calvià, una de las sensaciones que llegó a ser líder en dos jornadas diferentes. Enero se cerrará visitando Inca para medirse a un rejuvenecido Constància que no es el de antaño y que no brilla como local.
Febrero se abrirá con un encuentro en suelo rojiblanco frente al rival menos, sobre el papel, fuerte como el Santanyí. Dos partidos ante rivales ‘cinco estrellas' como el Alcúdia y el Mallorca B, ambos luchando por posiciones de play off, para despedir el mes en el feudo del Ferriolense. El último de estos nueve partidos lo jugará en casa el Mercadal, el 2 de marzo, en plenos carnavales, frente a la Peña Deportiva para después pasar la perceptiva jornada de descanso.