La Associació Històrica del Futbol Menorquí (AHFM), impulsada por Paco Perea, al margen de la procelosa labor de recopilación de datos que está llevando a término desde que fue alumbrada hace ahora casi un decenio (en 2010), y que la ha convertido en el principal archivo del contexto balompédico local, pretende a corto-medio plazo, y por medio de la creación del Museo Histórico del Fútbol Insular, convertirse en otro de los soportes del binomio deporte-turismo, modelo por el que desde hace un par de lustros trata de direccionarse, como elemento estratégico de la desestacionalización, la clase dirigente menorquina.
Al respecto, el proyecto de museo que bajo los auspicios de la AHFM tiene previsto activarse en el decurso de la presente temporada 2019/20 –con sede todavía por definir, varias poblaciones de la Isla han mostrado interés en ese sentido– sobresaldría como reclamo para «todos los menorquines vinculados al fútbol y de todos los no menorquines que han participado con el fútbol de Menorca», reflexiona Paco Perea, cuya propuesta ofertaría de la posibilidad «de ver las historias personales de cada vinculado al fútbol y genéricas de las actuaciones en el fútbol, que posibilitará ser un punto de visita para la recogida e intercambio de datos y material de los vinculados con el fútbol menorquín».