El director insular de Educación, Juventud y Deportes del Consell, Josep Juaneda, trasladó a los clubs de fútbol de Menorca, en el marco de un encuentro celebrado expresamente para tal fin el pasado martes en Es Mercadal, sus intenciones de reimplantar el código ético en las competiciones locales de las categorías benjamín y alevín, no legal a efectos oficiales y abortado en su momento por la Federació Balear, al amparo de la Española.
En la reunión, en la que los clubs estuvieron representados por responsables técnicos y directivos, Juaneda, mucho menos contundente que en la carta publicada en ese diario, en la que daba por seguro que el Consell pasaría a controlar ambas categorías al margen del reglamento de la Federació Balear en 2021, buscó un acercamiento para conseguir un objetivo que en realidad no depende de los propios clubs, como así hicieron estos entender al director insular.
Los clubs, en su mayoría partidarios, aunque con ciertos matices, del Código Ético, puesto que consideran que todo lo que sea favorecer el juego limpio y el respeto es positivo –pero sin perder al afán por competir y ganar–, dependen de la Federació, de su reglamento y normativa (y esta de los organismos superiores que rigen el fútbol), por lo que no emprenderán ningún tipo de ‘revolución' que pueda significar duras sanciones o una ruptura dramática con las instituciones deportivas.