El CE Alaior sigue confirmando rostros para dar forma a su primer equipo, actual subcampeón de Copa y de Liga Regional, que en el curso 2022-23 cumplirá un decenio consecutivo en el circuito insular.
El equipo albinegro, cuyo banquillo por segundo año consecutivo liderará Raül Capó (el acuerdo para la continuidad del técnico quedó perfilado a mediados del pasado mes de abril), tiene diez jugadores confirmados para el próximo curso, nueve de ellos tras haber renovado, además de un fichaje, el de Enric Lluch.
Un ramillete de renovaciones que incluye nombres de gran importancia, tanto a nivel de vestuario como en lo que concierne a la estructura de equipo, y en ese sentido el cuadro de Alaior, único exponente menorquín que en la pasada fase de ascenso a Tercera División fue capaz de avanzar más allá de la primera ronda, ha asegurado la continuidad de los capitanes, Sergi Pons ‘Viroll', que cumplirá su octava campaña en Los Pinos, Raúl Villalonga, Loren Ameller y Eric Mercadal (que el próximo curso cumplirá un lustro en el primer equipo albinegro).
Pichichi
Asimismo, Gerard Fuguet, que acumulará su décima temporada en el primer equipo del Alaior y fue el Pichichi del equipo en la pasada liga con once goles, Marcel Alzina (tres años en el conjunto albinegro), Xavi Barber (dos años) e Isaac Barro, (cuatro temporadas hasta la fecha), también han comprometido su continuidad en el proyecto alaiorenc.
Por su parte Enric Lluch, que retorna al club tras militar una temporada en la UD Mahón, es el primer fichaje que ha confirmado el club albinegro.
En las próximas fechas la entidad que se aloja en Los Pinos seguirá, de modo gradual, anunciando más renovaciones y alguna que otra novedad de mercado.
Después del excelente rendimiento que exhibió el Alaior en la temporada previa, en la que fue el único equipo de la Isla que alcanzó el tramo final de la Copa y de la Liga con opciones de éxito, además de ser el mejor de nuestros cuatro representantes en la criba de ascenso a la categoría balear, el planteamiento del club es dar continuidad al proyecto actual (en ese sentido, la renovación de Raül Capó, fue toda una declaración de intenciones), siempre con la perspectiva de, si la coyuntura se presta a ello, tratar de dar un salto de calidad y quien sabe si poder retornar a esa liga balear en la que el Alaior, entre 1980 y 2012 tuvo presencia ininterrumpida.