La mallorquina Mariona Caldentey tuvo que retirarse lesionada del tobillo derecho durante el encuentro clasificatorio para el Mundial 2023 que está enfrentando a su equipo contra Hungría en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas. Caldentey se torció el tobillo al pelear por un esférico con Diana Nemeth junto a la línea de fondo a escasos minutos para el descanso. Tras ser atendida en el terreno de juego, finalmente se retiró por su propio pie para no volver al rectángulo de juego. Su puesto lo ocupó, de salida en la segunda parte, Lucía García.
Pese a no estar disponible ya para jugar en lo que restaba de partido, la extremo del Barcelona salió renqueante una vez reanudado el juego tras el intermedio para presenciar desde el banquillo junto a sus compañeras lo que restaba de choque.
Los aficionados congregados en las gradas del campo principal de la Ciudad del Fútbol de Las Rozas para presencial el encuentro clasificatorio para el Mundial femenino del 2023 entre España y Hungría mostraron su malestar con la figura del seleccionador femenino, Jorge Vilda, entonando cánticos con el mensaje 'Vilda dimisión'.
En una semana tensa, donde se han escenificado serias discrepancias entre el propio técnico y sus jugadoras durante la concentración para este choque y el del martes 6 de septiembre ante Ucrania, el público se posicionó del lado de las segundas. Lo hizo desde antes del arranque del partido, silbando cuando se dijo el nombre del entrenador por megafonía y aplaudiendo al pronunciarse el de la defensa central y capitana Irene Paredes, titular en el arranque.
Con el duelo empezado, en el minuto veintiséis, coincidiendo con un gol de la propia Paredes, comenzó a pedirse la dimisión de Vilda desde la tribuna principal. Lo mismo sucedió al descanso, cuando el inquilino del banquillo pasó por delante para dirigirse al vestuario. Posteriormente, en la vuelta al verde, este accedió por otra parte del campo en la que no había espectadores cerca.