Como era de esperar, la llegada de Rafael Nadal a la Villa Olímpica de París ha desatado la locura. Pero a ello se ha añadido que su compañero de viaje por los que serán sus cuartos Juegos es otro de los deportistas de moda, otra gran estrella mundial: el murciano Carlos Alcaraz, reciente ganador de Roland Garros y Wimbledon. Ambos se instalaron este lunes en la capital francesa, a seis días del inicio del torneo de tenis, que se disputará en las emblemáticas pistas que han visto reinar al de Manacor hasta en catorce ocasiones.
Nadal y Alcaraz se convirtieron en foco de atención en la Villa, pero especialmente en el comedor, donde su presencia desató la locura. Tanto, que volvió a ser habitual, como las anteriores participaciones del balear, que numerosos deportistas, voluntarios o técnicos se le acercaran para pedirle una foto con la que inmortalizar un momento deseado por muchos de los miles de deportistas que residen allí estas semanas.
A Nadal le pidieron muchas fotos, pero la más cotizada era la que conseguía reunir al mallorquín y a Alcaraz, cuya popularidad también es notable, yendo más allá de los deportistas españoles, que también aprovecharon su oportunidad, aunque el grueso llegará este martes a París para preparar la ceremonia inaugural y su participación en los primeros días de competición.
Recién llegado de Bastad (Suecia), donde alcanzó la final individual y las semifinales en dobles, Rafael Nadal aspira a su tercera medalla olímpica en París 2024 y a su tercer oro, un hecho inédito en el deporte español. Especialmente con esa pareja tan mediática que formará con Alcaraz y que será uno de los grandes focos de atención durante la primera semana de los Juegos en Roland Garros.