La vela balear se ha ido de vacío de Marsella. Ni Paula Barceló ni Nacho Baltasar pudieron disputar las medallas en las clases 49erFX e iQFOiL, respectivamente pese a pelearlas hasta el final o, en el caso del joven regatista de sa Ràpita, verse apartado por una protesta del equipo suizo que le envió al undécimo puesto tras clasiificarse en jornada final de vértido, con un quinto y un tercer puestos.
Pero en el campo de regatas de Marsella, escenario de las competiciones de vela de los Juegos Olímpicos de París, había otro mallorquín en liza en la Medal Race de 49erFX. No sobre el skiff, sino en la lancha dando instrucciones y dirigiendo a la tripulación neozelandesa. Javier Torres, doble campeón olímpico de la clase como entrenador con las brasilleñas Kunze y Grael, se quedó a las puertas de la que hubiera sido su tercera medalla olímpica consecutiva.
Tras una brillante remontada, Torres y sus pupilas, las neozelandesas Jo Aleh y Molly Meech, pasaron de la cola de la clasificación en la primera jornada, a progresar lentamente hasta encadenar en las pruebas 7, 8 y 9 nada menos que un tercero, un segundo y un primer puestos que les catapultaron en la general hasta cerrarla con el séptimo lugar en la prueba 12, que ganaron las españolas Barceló y Echegoyen.
En la cita decisiva, Meech y Aleh siguieron yendo a más, peleando por las medallas, que se quedaron muy cerca. Fueron cuartas finalmente, por detrás de las neerlandesas Van Aanholt y Duetz, bronce; la plata fue para las italianas Germani y Bertuzzi y el oro para las suecas Bobeck y Netzler, con la embarcación española fuera de la Medal Race como duodécima.