Fernando Hierro, nuevo seleccionador español, mandó un mensaje optimista en su presentación como sustituto de Julen Lopetegui a dos días del estreno de España en el Mundial de Rusia, y confesó que no se habría perdonado «haber dicho que no» al ofrecimiento del presidente Luis Rubiales.
«Cuando el presidente me ha comentado la posibilidad tenía tres alternativas: una decir que no, otra irme y la tercer aceptar y estar presente, saber que hay un grupo de jugadores, un 'staff', una Federacion y un fútbol español y que es el momento de dar un paso adelante», dijo.
«Lo he tenido claro desde el primer momento. Es mi responsabilidad. No podía decir que no porque yo mismo no me lo perdonaría», aseguró.
Hierro puso el foco en el reto del Mundial, convencido de que nada de lo ocurrido afectará en lo deportivo. «Es un reto bonito, apasionante. Las circunstancias son las que son y desde ahí acepto con valentía como no puede ser de otra forma, mirando y pensando que tenemos un grupo de jugadores que llevan dos años trabajando por este Mundial».