Andrew Betts, Caio Torres o Ratko Varda. En este sentido, y con algún que otro suspiro por el pívot brasileño del Unicaja Paulo Prestes, están ordenados los candidatos a la última ficha que cerrará la plantilla que el Menorca Bàsquet sacará a competir esta temporada en su regreso a la ACB. Pero según reconoció Oriol Humet, director general del club, ayer en la rueda de prensa de presentación del joven base Miki Servera, "a día de hoy todavía no hemos hecho ninguna oferta por el pívot".
En este sentido, Humet quiso explicar que "estamos analizando perfiles y candidatos para cubrir esa décima ficha y a día de hoy todavía no hemos hecho ninguna oferta", además, el director general reconoció que "el 'timming' está siendo el mismo que hemos tenido con el resto de la plantilla durante todo el verano", lo que quiere decir que "en el momento que tomemos una decisión y esté bien meditado haremos una oferta para terminar de confeccionar la plantilla".
Humet admitió con gran tranquilidad que "la posición que queda por cubrir era la que sabíamos que sería la última y la que antes teníamos que anunciar era la de Ivan Radenovic", última incorporación para el Menorca Bàsquet, a expensas de que finalmente el club tome una decisión que favorezca a Andrew Betts, Caio Torres o Ratko Varda, a pesar de que éste sea el que cuente, de largo, con menor número de opciones de acabar jugando en el Pavelló Menorca.
"Cuando creamos que estamos en el momento oportuno, haremos la oferta al jugador que creamos que se ajustará mejor a nuestro equipo", dijo Oriol Humet, que lejos de dar nombres o detalles alguno señaló que "buscamos un '5' que complemente a los demás jugadores interiores que tenemos". Con lo fichado hasta el momento, lo que parece claro es que el décimo jugador será un gigante que se encargará del juego duro en la pintura. Estas características, sumadas a su experiencia, colocan a Betts, 33 años y 216 centímetros, como el jugador ideal para fichar, aunque la juventud de Caio Torres y el margen de mejora si se implica, rompe una lanza a favor del carioca.
Pero, a falta de concretar si es cierto o no que el club no ha dado ningún movimiento firme por alguno de los jugadores que interesan, Oriol Humet no dudó en reconocer que "si supiéramos qué jugador queremos, ya habríamos hecho la oferta".
A expensas únicamente de la incorporación del '5', y tras hacer una clara apuesta por jugadores con proyección y cuyas ganas de hacerlo bien y dar el salto definitivo hacia ACB pueden ser la principal baza, Oriol Humet rechazó hacer todavía una valoración del grupo que se ha hecho. "La valoración de la plantilla la haremos cuando empecemos a entrenar", dictó el director general, que intentó no restar protagonismo a Miki Servera en el día de su presentación.
Vinculación con el CB Jovent
Finalmente la oficialización del acuerdo de vinculación entre el Menorca Bàsquet y el Alaior Jovent de liga EBA se hará esta mañana en una rueda de prensa en la cantera de Loreto.
Finalmente serán cuatro los jugadores que estarán vinculados entre los dos equipos. Dos de ellos, Joan Faner y Rafa Molina, ya se adelantaron por prensa y hoy se harán oficiales sus contrataciones. Al acto acudirán los presidentes Benito Reynés y Xavi Saiz.
"No sentiré vértigo en la ACB"
A sus 18 años el mallorquín Miki Servera se presentó como lo que es, un joven con experiencia en el baloncesto pero con cierto nerviosismo ante los micrófonos y las cámaras. "Estoy muy contento de poder formar parte de este equipo y con el Menorca que me está dando esta oportunidad, que espero aprovechar al máximo desde la humildad y el trabajo" y remarcó que "es un orgullo poder jugar en ACB con un equipo de las Islas".
Servera reconoció que "en Menorca la afición se vuelca con el equipo; intentaremos darle muchas alegrías" y se definió como "un jugador competitivo y ambicioso". A la hora de definir el que será su nuevo equipo, el base dijo que "el Menorca ha hecho un equipo con mucha ilusión, con jugadores que aspiran a progresar en su carrera deportiva lo que ayudará al equipo a crecer y a competir".
Cuestionado sobre su juventud y si los nervios pueden afectar a su rendimiento, Servera dijo que "no creo que sienta vértigo para afrontar este reto porque estoy trabajando para ello" y recalcó que "será un reto muy bonito porque es el sueño que tiene todo jugador de baloncesto desde pequeño. Trabajaré para intentar dar lo máximo y para divertirnos".
A la hora de definir su posición, Servera destaca por ser un base alto (mide 197 centímetros) y reconoce que "me gusta mucho jugar de base pero si el entrenador me hace jugar de escolta me adaptaré". Precisamente al timón compartirá minutos con Diego Ciorciari, "un gran base del que espero aprender lo máximo".
El mallorquín admitió que no conoce mucho a Paco Olmos, su nuevo técnico pero que le han hablado de él "muy bien". Sobre su primer año completo en la ACB, Servera espera "ayudar al equipo en lo que pueda desde el trabajo. Tengo mucha ilusión por empezar, conocer a mis compañeros y adaptarme a la Liga, que es complicada".