El futbolista Rubén Martínez, de 20 años, nació en Menorca, donde vivió hasta los 12 años, cuando su familia se marchó a Barcelona. Unos años después de llegar a Cataluña, este menorquín recibió la llamada del Barça. Durante dos temporadas de recuerdo imborrable para él militó en el juvenil de la Masía. Con 18 años marchó cedido al Málaga B, en Tercera, y la temporada pasada jugó en el Premià de Mar catalán, en la misma categoría.
Esta semana ha fichado por el Alicante de 2ªB, en lo que supone un salto importante de categoría para él, más aún teniendo en cuenta que el levantino es un equipo histórico que hace dos temporadas militó en Segunda. Aunque la jugada no está exenta de cierto riesgo, ya que el club celeste se encuentra en una comprometida situación económica que provocó la salida de la mayoría de los jugadores del año pasado. De hecho, el club que preside Juan Antonio Iniesta ha realizado, con el de Martínez, 14 fichajes.
A este joven futbolista, que se siente muy unido a Menorca, le han tanteado desde diversos clubes de Segunda B, algo que habla en favor de su progresión, teniendo en cuenta que la temporada pasada del Premià fue muy pobre. Cuando se le pregunta sobre si le gustaría algún día jugar en Menorca, responde rápidamente que sí, pero enseguida matiza que en Alicante se encuentra muy bien. Por si acaso.
¿Qué supone para usted haber fichado por el Alicante?
Se trata de un equipo puntero en Segunda B, el año anterior fue complicado pero antes estuvieron en segunda. Para mí era una buena opción y pinta bien.
¿Qué espera de la próxima temporada? ¿Aspira al ascenso?
Tengo muy buenas expectativas, espero que logremos realizar una buena campaña. Pero nuestro objetivo es sumar puntos y lo que tenga que ser, será. Hay que ir partido a partido.
Ha logrado subir de categoría...
Sí, aquí me encontraré con más profesionalidad. Para mí es muy positivo debutar en 2ªB con 20 años, y voy a darlo todo.
¿Cuál será su rol en el equipo?
Me han cogido para que juegue por la banda izquierda. Puedo hacerlo tanto de lateral como de extremo, aunque creo que aquí me colocarán más como atacante.
¿De qué forma se definiría como jugador?
Soy un extremo rápido y habilidoso. Soy trabajador y aporto bastantes asistencias. Como lateral soy muy ofensivo y estoy muy encima de los rivales.
¿Qué me dice de la temporada anterior, en el Premià?
Fue un año malo, el equipo sufrió y cuando se entra en una dinámica negativa es difícil salir de ella.
¿Y en lo personal?
También fue negativo porque sufrí dos lesiones importantes. Primero me fracturé un hueso metatarsiano en un pie, algo que es complicado de curar y me tuvo más de dos meses parado. Y en verano me rompí la clavícula, otros tres meses de baja.
Y a pesar de ello ha subido de categoría...
Sí, ya tenía previsto salir, tuve contactos con bastantes clubes de Segunda B pero, al final, la única oferta firme, fue la del Alicante. El fútbol está muy parado por la crisis y creo que puedo estar muy contento por lo que he conseguido.
¿Le gustaría jugar en Menorca alguna vez?
Claro, me siento menorquín, vuelvo cada año a la Isla... Pero estoy bien en Alicante. Ya se verá qué pasa con el tiempo.
¿Y no le da reparo recalar en un club con tantos problemas económicos?
Esos asuntos ya están solucionados. Yo estoy tranquilo y por lo que a mí respecta no hay ningún problema.
¿Qué sabe de sus nuevos compañeros?
En el club han apostado por gente joven pero contrastada, ya que muchos de mis compañeros cuentan con experiencia en Segunda B, en equipos importantes.
¿Le ha dado tiempo a conocerlos?
Empecé a entrenar el martes, así que no he tenido mucho tiempo. Pero por ahora va muy bien, es un grupo joven y los compañeros me han aceptado de maravilla.
¿Ha hablado ya con el entrenador? ¿Sabe algo de él?
Sólo sé que está muy encima en los entrenos, pero poco más. Por ahora me ha dicho que esté tranquilo, está más pendiente de cómo me adapto, de cómo me encuentro fuera del campo que de lo que hago en el campo.