Acaba de elevar su figura a la categoría de mito, porque nunca antes un menorquín había logrado atrapar una medalla en unos Juegos. Pero Sergio Llull (Maó, 1987) habla desde la humildad que le ha significado desde que hace un buen puñado de años abandonó Menorca para marcharse a Manresa. Con la voz quebrada por el cansancio y tras muchas horas de concentración y desgaste físico, el jugador explica como inolvidable su experiencia en Londres, además de advertir que están más cerca que nunca de Estados Unidos.
Le imagino feliz con la medalla de plata, aunque después del partido se le viera algo contrariado por haber perdido el oro...
Sí, es cierto, tras el partido no teníamos tanta alegría porque vimos la posibilidad de haber logrado el oro. Hoy -por ayer- y en los próximos días tendremos mayor conciencia de lo que hemos conseguido, porque lograr una medalla de plata en unos Juegos es muy complicado.
¿Esperaban poder competir hasta el final por el oro?
No lo sé, pero estuvimos muy cerca, esa es la realidad. Les hicimos sudar y tuvieron que darlo todo para ganar. Fue un partido precioso y a buen seguro que mucha gente se enganchará al baloncesto después de ver la final.
¿Qué hay que hacer para poder ganar a Estados Unidos?
Son muy buenos, tienen talento y un gran físico. Es muy difícil ganar a un equipo así. Pero estuvimos más cerca que nunca. Hasta que faltaban 2 o 3 minutos estábamos dentro del partido y debemos estar orgullosos de lo que hemos conseguido.
Igualmente, el camino hasta la final fue muy exigente. ¿Les dolieron las críticas tras perder ante Rusia en la fase previa?
Lo bueno de este equipo es que es una piña y no hacemos mucho caso ni a las críticas, ni a las alabanzas. Nos dedicamos a jugar y a tratar de ser mejores cada día, a pensar en el próximo partido. Es un equipo ganador y eso se nota en este tipo de situaciones. Desde el primer día nos dedicamos a ir partido a partido, tanto en la fase de grupos como en la final. Esa fue la clave del éxito, dar el 100% en cada uno de los encuentros.
¿Cómo ha vivido esta primera experiencia olímpica?
Estar en unos Juegos Olímpicos es algo inolvidable, distinto a lo que había vivido hasta ahora. Estar conviviendo en la Villa Olímpica con otros deportistas de otros países es una experiencia única e irrepetible. Se debe vivir en primera persona para poder contarlo, porque por mucho que te lo imagines no es comparable con lo que te encuentras allí.
Usted ha ganado dos medallas en europeos, ha disputado partidos de Euroliga, de la ACB al máximo nivel... ¿Hay algo que se acerque a la emoción de vivir unos Juegos?
Son competiciones diferentes, cada una tiene su aliciente. Pero es evidente que unos Juegos Olímpicos tienen otra dimensión, muy distinta al resto. Nunca había logrado una plata en una Olimpiada y es un privilegio poder haberla ganado con esta generación de jugadores.
Hablando de esa generación ya hay algunos miembros del equipo que han anunciado que abandonan la selección tras estos Juegos de Londres. ¿Sigue habiendo futuro tras ellos?
Estamos ante una generación histórica, irrepetible, que ha dejado a España en lo más alto del mundo del baloncesto. El compromiso de todos ha sido espectacular, incluso de jugadores que llegaron a Londres lesionados o con problemas físicos, como Juan Carlos Navarro o Marc Gasol. No sé qué pasará a partir de ahora, pero sí que hay jugadores con muchas ganas de continuar.
¿Sabe que es el primer deportista menorquín en conseguir una medalla en unos Juegos Olímpicos?
Sí, y estoy muy orgulloso de poder ser el primer menorquín en lograrlo. Siempre he 'sacado' la bandera de Menorca por allí donde he ido y creo que es un privilegio poder lograrlo con esta gran generación de jugadores.
¿Imagina cómo está Menorca tras la consecución de la medalla?
(Risas). No, no he tenido tiempo para mirar ni leer nada. Lo que hemos conseguido es muy grande y es un honor que la gente de la Isla se sienta partícipe de este logro porque yo estoy muy contento de haber podido participar de este éxito de la selección.
No sé si ha tenido oportunidad de ver a Albert Torres en la Villa, pero ¿entiende que hubiera dos menorquines en Londres como un éxito de nuestro deporte?
Sí, por supuesto. En Menorca hay y habrá grandes deportistas y es todo un éxito que una isla tan pequeña pueda estar representada con dos deportistas, sin duda.
Fue campeón de la Copa del Rey, MVP del torneo, subcampeón de la liga ACB... ¿Corona esta medalla de plata su mejor año?
Sí. Creo que podríamos haber ganado la liga contra el Barça porque estuvimos muy cerca de lograrlo, pero ha sido un año muy bueno, inolvidable para mi.
¿Y ahora qué? Se ha vinculado su futuro con el de los Rockets de Houston, que tienen sus derechos en la NBA, y también se habla de un interés del Real Madrid por ampliar su contrato. ¿Qué hará?
De momento, descansar. Tengo dos años más de contrato con el Real Madrid y lo que quiero es seguir allí y continuar ganando títulos como hemos hecho esta temporada. Lo que me preocupa ahora es descansar estas dos semanas hasta que empiece la pretemporada y cargar pilas, porque seguro que la próxima va a ser muy exigente de nuevo.
¿Tiene previsto volver a Menorca antes de iniciar esa concentración con el Madrid?
Primero voy de vacaciones a Formentera a pasar tres días y luego iré a Menorca para descansar y ver a la familia y los amigos.