Rafael Nadal aseguró este viernes que a nivel personal siente «la baja» del serbio Novak Djokovic, porque «siempre es una lástima cuando los mejores del mundo no pueden competir», al referirse a la ausencia de 'Nole' en el Abierto de Estados Unidos por su negativa a vacunarse contra el coronavirus. «De alguna manera ya sabíamos que no jugaría, si no hubieran cambiado las reglas (de acceso a Estados Unidos). A nivel personal estoy triste, siempre es una lástima cuando los mejores del mundo no pueden jugar, ya sea por lesiones y por razones distintas», dijo Nadal en una rueda de prensa organizada en Nueva York en el día de medios previo al comienzo del Abierto de Estados Unidos.
«No contar con uno de los mejores jugadores del mundo siempre es una baja importante, es duro para los aficionados, para el torneo y también para los jugadores, porque siempre queremos que estén los mejores», prosiguió. Al mismo tiempo, Nadal destacó que «el deporte es más grande que un jugador» y que el tenis seguirá incluso cuando se retire él mismo, Djokovic o el suizo Roger Federer. «Yo también perdí muchos partidos y torneos por lesiones, pero el torneo sigue y el mundo del tenis, también. Incluso si (la ausencia de Djokovic) no es una buena noticia, el mundo y el tenis seguirán sin Djokovic, sin mí, sin Roger (Federer). Djokovic es uno de los más importantes jugadores de los últimos veinte años y personalmente, lo siento por él», concluyó.
Nadal regresa a Nueva York tras perderse las últimas dos ediciones del torneo y lo hace con ilusión por volver «a uno de los sitios más importantes» de su carrera, en el que triunfó cuatro veces. Se mostró satisfecho por el ritmo de entrenamiento que ha tenido en los últimos días, aunque reconoció que la lesión de abdominales sufrida en Wimbledon sigue condicionándole un poco a la hora de sacar. «Una lesión de abdominales es difícil de gestionar, es un sitio en el que necesitas flexibilidad. Pero con una cicatriz al principio no es fácil, existe el riesgo de tener una rotura. Espero estar listo», afirmó. «Tengo cuidado con el saque, la verdad, pero en general entreno con un alto nivel de intensidad y estoy bastante feliz con mi nivel. Llevo dos semanas en el Tour, entrenando cada día, jugando sets cada día en los últimos cinco días. Eso me ayuda», añadió.
Tras el Abierto de Estados Unidos, Nadal participará en la Copa Laver, que, en principio, marcará el regreso del suizo Roger Federer. «Estoy contento por jugar la Laver Cup y por ver a Roger en pista. Espero que esté bien y que pueda competir. Veremos. Llevo mucho tiempo sin verle en pista y espero que pueda volver. Lo más importante es que esté sano y feliz. Si tiene salud y felicidad por regresar, será fantástico. Y si no, solo podemos decirle 'gracias' por lo que hizo», dijo. «Tengo confianza en que seguiremos teniéndole para rato y estoy ansioso por jugar la Laver Cup con él», concluyó. Nadal regresó a competir la semana pasada en el torneo de Cincinnati, cuando perdió en su estreno con el croata Borna Coric, un jugador que practicó un altísimo nivel de tenis y que se coronó campeón.