Había avanzado Manel Fuentes que el concierto de Es Mercadal iba a ser especial. Y fue por ello que las primeras palabras que pronunció, cuando pasaban diez minutos de la medianoche, hicieron referencia a los tristes atentados de Barcelona y Cambrills. Acto seguido, el evento se convirtió también en un homenaje a quien es su ídolo musical, Bruce Springsteen, «The Boss», arrancándose con los acordes de una emocionante «My city».
Una vez que la banda menorquina The Trikinis ya se había encargado de caldear el ambiente, Fuentes y su Spring's Team convirtieron el Recinte Firal de Es Mercadal, donde se reunieron 1.400 personas, en un toda una fiesta. El showman prometió el concierto más largo que había realizado hasta la fecha, y cumplió, con más de dos horas y media de puro dinamismo, energía y, sobre todo, complicidad con el público, totalmente entregado y muy participativo a la hora de corear los estribillos.
Un espectáculo que hizo frente a las adversidades. Y es que los problemas de comunicación por culpa del atentado impidieron que la furgoneta de la banda llegara a su destino con el back-line. Un problema que se solucionó con la colaboración de un buen número de músicos locales que prestaron sus instrumentos a la banda.
Fuentes, como «The Boss», también fue «El Jefe» en Menorca, un rol que desempeñó haciendo un repaso a algo más de una veintena de canciones del músico de Nueva Jersey, entre las que no faltaron melodías como las de «Missing», «Dancing in the dark» o la archiconocida «Born in the USA». Un auténtico espectáculo desde el minuto uno, tan emotivo como intenso.