Si hay algo que no le sobra a Gigi McFarlane, y parece una buena señal, es tiempo. Cuando habla de cómo se presentan los próximos meses reconoce que «este verano solo voy a cantar, dormir y conducir». Pero antes de afrontar esa apretada agenda, se dejará caer este viernes por la terraza de Es Claustre, en Maó (21 horas), para actuar en la tierra donde creció. «Siempre me hace mucha ilusión volver a Menorca, porque me puedo reencontrar con toda mi gente, los amigos del colegio, los profesores y los compañeros de la Casa de la Infancia», confiesa la artista, nacida en Londres de madre jamaicana y padre alemán.
Es la primera vez que actúa en la Isla desde que, el año pasado, formara parte del estreno del Lazareto Festival, de cuyo cartel volverá a ser partícipe este agosto. Y regresa, confiesa, siendo alguien más popular gracias a su paso por el talent show de RTVE «Cover Night». «Ahora la gente me conoce bastante más por la calle», bromea.
Sin embargo, reconoce que la televisión no es lo suyo, y que si participó en ese programa fue porque quería aprovechar para dar a conocer un proyecto personal que tiene que ver con ayudar a gente que, como ella, pasó por casas de la infancia. «Lo que pretendo ahora es intentar usar el poder que tengo sobre el escenario para motivar a los demás, para que los niños y niñas vean que se puede salir adelante», avanza la artista sobre una iniciativa que aún está en fase inicial.
McFarlene lleva ya años en el mundo del espectáculo, y en los últimos tiempos acostumbra a trabajar en invierno como intérprete musical en circos por Europa, mientras que los veranos, instalada en Barcelona, aprovecha para girar con su espectáculo.
La cantante es noticia porque recientemente acaba de lanzar un nuevo single, «Welcome sexy ladies», una canción muy disco y con un sonido festivo que se aleja más de su etapa acústica. Un camino que quiere seguir explorando para su próximo álbum.
Para su nueva visita a Menorca llega acompañada del saxofonista Octavio Fanés y Cristian Torres a los teclados. El trío abordará canciones propias de McFarlene, mezcladas con algunas versiones. «Va a ser toda una fiesta», avanza la artista.