Seguramente se podría escribir un interesante libro sobre la gran cantidad de proyectos artísticos que nacieron o se desarrollaron durante la pandemia como consecuencia del confinamiento. Un periodo durante el que Toni Gener Ferrero también comenzó a escribir la historia de «El covard», texto que fue puliendo con el paso del tiempo y que por fin cobrará vida el próximo 11 de julio sobre el escenario del Teatre des Born.
Dos días después de que en Ciutadella se conmemore, como cada 9 de julio, el asalto turco a la ciudad, los trágicos hechos acontecidos en 1588 recobrarán protagonismo desde un enfoque artístico. «La idea desde el principio fue explicar lo que entonces se vivió desde dentro del pueblo, desde la perspectiva de una persona que vivió el ataque en primera persona», explica Gener.
Así comenzó a tomar forma un proyecto que acabó de consolidarse con la incorporación de otros dos artistas. El primero fue el hermano del autor, Rodo Gener, actor que se encarga de dar vida al personaje de ficción creado para contar la historia. Con el texto sobre la mesa y buscando la forma de llevarlo a escena surgió el tema de la música se les ocurrió invitar a Leonmanso. Y este, sin pensárselo dos veces, aceptó el reto de componer la banda sonora, que interpreta sobre escena como un elemento más de la producción y poniendo de alguna forma también la voz de la conciencia de personaje protagonista. Discurso que suena a través de ocho canciones, interpretadas a voz, guitarra y armónica compuestas especialmente para la ocasión.
«El covard» es un proyecto colaborativo en el que cada uno juega su rol pero cuya dirección firman conjuntamente. Los hechos históricos que relatan son de sobra conocidos por el público local y en lo que se refiere al enfoque para contarlos el título es una buena pista. «El protagonista no es el típico personaje que pasa a la historia... a la historia pasan los héroes, los que dan su sangre y si vida por salvar a los demás, pero este no», relata el autor del texto. Un superviviente, continúa, «que vive con la amargura de haber sido un cobarde, con el arrepentimiento, la rabia, la pena y la culpabilidad», pero con el que resulta fácil de empatizar por su espíritu de supervivencia.
Una falta de valentía que ayuda al protagonista a salvar la vida y poder contar una historia que llega al público a través de un monólogo. Formato este en el que Rodo Gener cuenta con una gran experiencia al frente de producciones como «Magallanes.0» o «Jo, Odisseu». El reto que se han planteado, relata el artista, es «que la gente entre a fondo» en un acontecimiento histórico de sobra conocido, «me gustaría que el público pueda sentir de alguna manera lo que se vivió desde dentro ese día».
Una historia local «pero un tema muy universal» añade al respecto Leonmanso, quien relata que la obra gira sobre «cómo afrontar la guerra como ciudadano». Por su parte, el autor del texto reconoce que es una recreación histórica «pero de un tema que vemos cada día en las noticoas» en alusión a lo que está ocurriendo en Palestina y Ucrania.
Un trabajo con fondo pacifista que precisamente que pese al enfoque local puede tener recorrido artístico fuera de la Isla, confían sus responsables. Algo que se vería favorecido al tratarse de un montaje con una escenografía sencilla apoyada por la iluminación de Santi Anglada. Una producción que, por otra parte, cuenta con la colaboración del Ayuntamiento de Ciutadella y el respaldo en la distribución de la firma local Xàfec Teatre.
«El covard», como es lógico, se permite licencias artísticas, pero detrás tiene también un riguroso trabajo de investigación histórica para el que los tres directores han contado con un equipo de colaboradores, como los filólogos Josefina Salord, Eugenia Moll y el historiador Marc Pallicer.
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