2025 está siendo un año especial para Coque Malla. El artista madrileño se encuentra embarcado en una gira con la que está celebrando sus 40 años sobre los escenarios. Una agenda en la que está combinando las actuaciones de gran formato, con invitados especiales para la ocasión, con conciertos de corte más íntimo bajo el título de «Una noche con Coque Malla». Con esta última fórmula ha aterrizado esta semana en la Isla, afianzando el idilio que mantiene desde hace años con el público menorquín, que agotó las localidades para las dos fechas programadas en el Teatre del Casino de 17 de Gener de Ciutadella. Medio millar de personas pudieron disfrutar entre el martes y el miércoles de un recital en el que el artista hizo un repaso a su carrera y, de paso, regaló algunas versiones con el único acompañamiento de su guitarra.
Empezó con el «Can’t help falling in love» de Elvis y le siguieron una veintena de temas salpicados con algún discurso. En la primera parte del espectáculo sonaron principalmente temas de su carrera en solitario («La señal», «Santo, santo», («El último hombre en la tierra»), pero en esta ocasión también tuvieron un protagonismo especial canciones de sus comienzos al frente de Los Ronaldos («Adiós papá», «Árboles cruzados», «Guárdalo», «Por las noches»).
No faltó, como era de esperar, la canción siempre más coreada en sus conciertos, la popular «No puedo vivir sin ti». Y entre las sorpresas, destacar el homenaje que realizó a Bruce Springsteen haciendo su particular revisión de «Bobby Jean» y el guiño a Santiago Auserón con una de las canciones más emblemáticas de Radio Futura, «La estatua del Jardín Botánico».
SmithNo vayas si no quieres, Smith. Te crees con derecho a protestar. Pero lo que de verdad, aburre es tanta queja, y tanta critica porque sí, y porque tienes acceso a un teclado anónimo para desahogar tu vacío. Intenta aportar algo la próxima vez. Sólo, con una guitarra, en el precioso teatro del casino, 250 personas enganchadas hora y media. El concierto estuvo fantástico, íntimo, cercano. Un gran artista y gran repertorio. Un lujo para Menorca. Vuelve siempre, Coque.