Todos los partidos con la excepción del PSIB han anunciado que impugnarán ante la Junta Electoral el debate entre candidatos que ha planteado IB3 ya que consideran que el ente no está respetando el acuerdo que alcanzaron para sortear tanto la posición en el plató como los turnos de intervención de los participantes. El anuncio llega después de que IB3 haya informado a las formaciones políticas de que cambiará el acuerdo alcanzado y, tanto en el turno inicial de intervención como en el turno final, se respetará la proporcionalidad de las formaciones políticas. En la práctica, eso supone que la candidata del PSIB, Francina Armengol, abrirá y cerrará el debate.
Ese es el sistema que se ha utilizado tradicionalmente a la hora de distribuir los tiempos en los debates que ha organizado hasta ahora IB3 y además era la propuesta inicial del ente a las formaciones políticas. Sin embargo, en la reunión entre los partidos, se acordó realizar un sorteo y Armengol ni abría ni cerraba el debate. El ente insiste en su comunicación a los partidos que, de esta manera, se mantiene el principio de proporcionalidad, pero el resto de formaciones políticas creen que ha habido una injerencia partidista y que IB3 ha hecho lo que quería el PSIB, después de que los socialistas avisaran de su intención de presentar una queja ante la Junta Electoral.
La realidad es que, en estos momentos, los detalles del debate no están cerrados ya que en el PP hay quienes defienden no acudir para mostrar su rechazo a esta manera de actuar. El resto de los partidos medita la conveniencia de acudir o no y no hay una posición clara. Vox envió ayer un comunicado en el que «invita» a las demás formaciones a no acudir «a esta tomadura de pelo en la que Manresa ha convertido el debate». La polémica por el debate se ha trasladado al terreno parlamentario después de que el PP haya pedido la comparecencia urgente del director general del ente, Andreu Manresa, ante la Diputación Permanente. «Nos parece un hecho de extrema gravedad», señala el portavoz del PP, Sebastià Sagreras, en un comunicado, en referencia a que Armengol «mande y ordene» y el director general de IB3 «obedezca».
Boicot al debate
El PP cree que Armengol rechazó el cara a cara con Marga Prohens y ahora intenta «boicotear» el debate entre entre todos los grupos políticos. «Ni Armengol ni el Consolat pueden utilizar de manera partidista las instituciones públicas en campaña electoral», añaden. Més y Podemos también han mostrado su profundo desacuerdo. Lluís Apesteguia, candidato de Més, cree que IB3 ha demostrado que no trabaja con «imparcialidad» y lamentó que el ente diera marcha atrás al acuerdo alcanzado «por una queja de un partido». La candidata de Cs, Patricia Guasp, por su parte, ha pedido al Consolat que no intervenga ni se entrometa en las decisiones de los partidos, como ha hecho.