Tomar café con vecinos para darse a conocer, pasear por el centro para dejarse ver y hacerse fotos, recorrer las calles con un coche decorado con carteles electorales y música a todo volumen y, cómo no, regalar flores, tazas, abanicos o sombreros. Casi todo vale durante los 15 días de la campaña electoral. Sin olvidar las entrevistas para radio, prensa y televisión, los debates con otros candidatos y las fotos y videos para subir a redes de internet.
Este domingo se elige a quienes formarán los gobiernos municipales, insular y autonómico para los próximos cuatro años. La campaña electoral que este viernes acaba no se inició el pasado viernes 12 como marca la Junta electoral ni siquiera el jueves 11 cuando los candidatos se adelantan -de mutuo acuerdo- cuatro horas y pegan carteles a las ocho de la tarde para salir un día antes en las fotos de prensa. El diseño de carteles, folletos o lonas así como los vídeos para internet se idean y preparan mucho antes, hasta un año según los asesores Josep Buñuel, miembro del comité electoral del PSOE y Jaume Garau, asesor de campaña de Més per Menorca.
Optimizar los recursos
El presupuesto máximo que cada opción política se puede gastar en esta campaña está fijado por ley y equivale a 11 céntimos de euro por habitante de la circunscripción correspondiente, aunque los grandes partidos que se presentan en más de la mitad de los municipios de una provincia pueden gastarse 150.000 euros más en esa provincia. Por otro lado, los partidos y agrupaciones reciben subvenciones del Estado para el gasto electoral y equivalen a 270 euros por cada concejal electo -en las municipales- y 54 céntimos de euro por cada voto obtenido.
Sin entrar en mensajes de fondo ni en ideologías, los cinco partidos con representación política a día de hoy en el Consell nos desvelan detalles de sus campañas, adornadas con su color preferido: azul para el PP, rojo para el PSOE, verde para MÉS per Menorca, morado para UnidesP odem y naranja para Ciudadanos.
El PP ha contado con una empresa externa para los carteles y otra para los videos de los candidatos y han contratado espacios de publicidad en prensa de papel y digital, radio, vallas publicitarias y paradas de autobús. También usan Instagram -con aumento de seguidores en los últimos meses-, Facebook y Twitter. Como propaganda agresiva poco vista hasta ahora, el PP ha repartido folletos comparando su partido con el PSOE al que define como «vendedores de humo».
El PSOE tiene una presencia similar en la calle y medios tradicionales. En las redes sociales, además de las tres citadas, Susana Mora tiene perfil de TikTok con músicas de Rosalía o Aitana. También han creado en YouTube la PSOE Menorca TV pero también han realizado muchas visitas puerta a puerta a los vecinos porque creen que sus candidatos «ganan en las distancias cortas».
Més per Menorca ha contratado, además de a Garau, a un diseñador también de Mallorca y «han procurado innovar, no hacer algo tan artificial como si fuera marketing, como los partidos grandes». El miércoles los candidatos visitaron el Congreso de los Diputados para reivindicar medidas para compensar el coste de la insularidad y han realizado actos de prensa con los pies dentro del mar o en una barca. También han tomado 100 cafés en pequeños grupos, llegando hasta a 1.000 personas.
Unides Podem y Ciudadanos no disponen de tantos recursos económicos ni de personal para sus campañas y ambos destacan que estos días son también laborables y de gestión -en el caso de UP- . Iniciaron las reuniones de campaña este mismo año y las definen como de «kilómetro cero» desde UP, que destaca la colaboración de Esquerra Unida y el uso de Instagram y «austera y artesanal» desde Ciudadanos.