Vox quiere hacer valer el escaño obtenido en el Consell, determinante para formar mayoría absoluta con el PP y para el vuelco de la institución hacia la derecha. Pero sabe también que el PP puede gobernar en solitario con su apoyo o sin él negociando puntualmente los asuntos que, como los presupuestos, requiera mayoría suficiente.
Xisco Cardona, líder del partido en la Isla, avisa de que de algún modo tendrán que contar con Vox, admite que los resultados «no condicionan al PP, pero no tiene la mayoría absoluta, ha de asumirlo, y tendrá que contar con nosotros. No es una cuestión ideológica, es una cuestión matemática», dice.
No ha hablado con Vilafranca después de la noche electoral, «Ni con nadie del PP», añade. Tampoco tienen prisa, hay un mes por delante para ponerse de acuerdo, tanto para formar una coalición de gobierno o, de acuerdo con la tendencia anunciada por Marga Prohens, gobernar en solitario en las instituciones donde sea posible. Todo apunta a que la política de pactos en las instituciones autonómicas tendrá unas líneas comunes.
Cardona resalta su entrada en las instituciones, «los menorquines han hablado con claridad, no quieren a la izquierda gobernando, han dado la responsabilidad a la derecha. Son los menorquines quienes nos han dado la confianza compartida con el PP, que no tiene la mayoría absoluta», reitera.
Recuerda también la posición de Núñez Feijóo, presidente nacional del PP, que ha dado libertad para pactar, «no hay, por tanto, ningún veto que impida pactos con Vox», lo que puede interpretarse como un deseo por este partido de entrar en el gobierno del Consell.
Elecciones generales
Sin embargo, en la expectativa de esas negociaciones ha surgido la convocatoria de las elecciones generales, que reclama su protagonismo y urgencia en la agenda de los respectivos paridos. «Volvemos a tener la maquinaria en marcha. Presentaremos candidato al Congreso y al Senado», asegura Xisco Cardona.
No da nombres, pero señala que representarán una nueva hornada de políticos.
Guiem BoschSa campanya va ser un èxit i es resultats ho demostren. Xisco va dir sa veritat sense insultar a ningú, lo que sí que són un insult a sa intel·ligència són algunes declaracions de personatges del PP. Ja està demostrat que es vot perdut és al PP, perquè no barata res i fan polítiques molt semblants a ses del PSOE, només serveix per deixar-ho tot igual, lleis de propaganda anomenades de memòria, llei "trans", pujades de impostos, amb majoria absoluta ho van deixar tot igual, ni tan sols vau legislar per posar a puesto als okupes... I ara Feijoo vol pactar amb el PSOE més extremista que hi ha des de abans de sa transició, vol pactar amb qui ha reduit condemnes i amollat a violadors i pederastes i fa lleis per afavorir a lladres de cases "okupes", sediciosos i corruptes i pacta continuament amb Bildu es partit des 44 terroristes a ses llistes electorals.