Hay un segmento de electores del PP en fuga que busca una opción en la que refugiarse. Una de ellas es Vox, descabezado en la dirección y desmembrado ahora mismo en la Isla, que a su vez busca un perfil del tipo Antoni Camps para atraer a esa bolsa de votos en busca de destino.
El todavía diputado autonómico del PP participa de esa reflexión. Anunció que no seguiría como diputado, «pero si quisiera seguir, tengo ofertas», apunta. La principal viene del partido que en Balears lidera Jorge Campos, «me están insistiendo y sé que empieza a trascender, pero no he decidido nada», responde mientras sugiere que debería tomarse unas vacaciones de la política y trabajar en la empresa familiar.
No parece que vaya a dar ese paso, «sería más sensato, pero lo que me pone realmente es la política», admite como una primera pista de sus intenciones. Deja claro que pase lo que pase en las próximas semanas tiene un compromiso con el PP, partido por el que es y ha sido diputado del Parlament en las últimas legislaturas. Hasta que no haya disolución de la cámara no dará a conocer su decisión.
Un cas clavat al dit: "Los mismos perros con diferentes collares".