Daniele Callegari dice que el Teatre Principal es como un oasis, "y eso que he trabajado en los teatros más importantes de España" asegura. El milanés se ha convertido en el director musical con más éxito de su generación. Ha recorrido el mundo dirigiendo óperas aunque él se confiesa un apasionado de Verdi, "es mi vida. Creo que es algo genético" comenta.
¿Cómo ha planteado "Così fan tutte" a nivel musical? ¿Algún arreglo especial?
Creo que es un proyecto que busca perfectamente la continuidad de la obra. La tocamos con instrumentos normales y sin cortes, en base a la partitura original. Contamos con una participación de primera calidad. Lo que más me gusta es que es la primera vez que dirijo una obra de Mozart. Normalmente, escojo piezas de Verdi y Puccini pero ahora que tengo ya casi 50 años, empiezo con él.
¿Qué sensaciones le produce el Teatre Principal?
Me encanta este sitio. Parece un oasis. Para mí es un orgullo poder trabajar aquí porque tengo entendido que es muy antiguo, así que está lleno de historia. Eso que dicen de que tiene buena acústica es cierto. Me gusta mucho cómo ha quedado el escenario, la idea ha sido muy buena. Con pocos elementos se ha conseguido un decorado muy acorde con la música.
¿Qué momento de su día a día le resulta más satisfactorio?
Hay que tener en cuenta que ensayamos con piano y los cantantes, luego con la orquesta, con el coro y con la escena al piano. Ya por la noche, hacemos el ensayo con todos los elementos juntos. Ese es el momento que más me gusta porque descubres si ha funcionado todo el estudio que has realizado anteriormente.
¿Tiene algún sueño que realizar a nivel profesional?
Quiero llevar a cabo las 27 óperas de Verdi y creo que estoy en el buen camino porque ya llevo 18. Un buen momento profesional fue mi debut en el Metropolitan de Nueva York, siempre quise hacerlo y fue increíble trabajar en uno de los teatros más importantes del mundo.
¿Un director musical analiza hasta la música que escucha en casa?
La verdad es que en casa no escucho música, suele ser en el coche. Pongo la radio para que haya una variedad pero debo decir que la música, cuando es buena, es buena.