El humo detectado en la zona de calderas del buque de pasajeros "Sorolla", de la compañía Acciona, activó ayer, alrededor de las 9.30 horas, un operativo de emergencia en el que participaron el 112, agentes de las policías local, nacional y portuaria, la Guardia Civil, una ambulancia del SAMU y efectivos de bomberos que, sin embargo, no llegaron a intervenir, ya que el incidente fue resuelto por la propia tripulación del barco, según informó la naviera. El barco zarpó rumbo a Barcelona con normalidad a las 11.50 horas, con 50 minutos de retraso sobre su horario previsto, ya que los operarios inspeccionaron la sala de máquinas para cerciorarse de que no existían daños y de que todos los sistemas funcionaban correctamente.
El aviso de Autoridad Portuaria al 112 se registró pasadas las 9 de la mañana, cuando el barco se encontraba atracado en la Estación Marítima de Maó, sin pasajeros, y fue debido a la detección de humo en la zona de calderas, aunque no llegaron a producirse llamas, según señaló el gabinete de comunicación de Acciona tras el suceso. El barco emprendió el viaje hacia Barcelona con 131 pasajeros a bordo, 70 vehículos y 44 camiones que comenzaron a entrar en el interior del buque alrededor de las 10 horas, una vez se comprobó que no existía riesgo en las calderas.
El "Sorolla" tenía previsto atracar ayer noche en el puerto de Barcelona y zarpar rumbo a Eivissa a las 22.30 horas. La compañía estimó ayer que recuperaría el retraso registrado en Maó durante las horas de navegación en alta mar y que el incidente no perjudicaría a los pasajeros. Algunos de estos viajeros, a punto de embarcar en la mañana de ayer, contemplaban el operativo de emergencias sorprendidos y preguntaban a los trabajadores de la compañía en tierra qué había sucedido dentro del buque, debido a la espectacularidad del despliegue de agentes de policía y bomberos que se llevó a cabo en la Estación Marítima.