Definitivamente ayer fue el día en que muchas personas se deciden a hacer el cambio de ropa, y rescatar de trasteros y bolas antipolillas los abrigos, bufandas y guantes. La temperatura de ayer en Menorca descendió cinco grados de media en relación al día anterior, algo que acompañado por el día gris y lluvioso, y el viento que ganó fuerza perfiló una sensación térmica que recordaba el invierno. <
El sábado, en el Aeropuerto de Menorca se registraba una temperatura máxima de 21,5 grados centígrados. Ayer, el termómetro no pasó de los 16. En Ciutadella se quedaron en 16,4 de máxima, y en Es Mercadal, 15,9. La lluvia de la mañana fue débil, con tan solo cinco litros por metro cuadrado acumulados en Ciutadella y menos de medio en Maó. Por la tarde volvieron a caer algunos chubascos, que la Agencia Estatal de Meteorología aún no había contabilizado al cierre de esta edición.
El otro protagonista del día fue el viento. En el Aeropuerto se registraron rachas de 55 kilómetros por hora, algo que se notó en el mar. Baleària canceló sus trayectos entre Ciutadella y Alcúdia, mientras que Iscomar e Interilles operaron con normalidad. Para hoy se prevé que la tramontana aumente y que la Isla esté en alerta naranja por fenómenos costeros adversos, con lo cual Baleària e Interilles ya han anunciado que no navegarán entre Menorca y Mallorca.