¿Es justo que el Gobierno subvencione de igual modo, con el 50 por ciento del descuento de residente, a un ciudadano de Mallorca que dispone de una variada oferta de vuelos y precios competitivos y reducidos, que a otro de Menorca, Eivissa o Formentera que tiene a su alcance muchas menos frecuencias y destinos y unos precios mucho más elevados? ¿Debería compensarse la doble y la triple insularidad que padecen los vecinos de las islas menores con un reparto no equitativo de los 110 millones de euros que el Ejecutivo central ha incluido en los Presupuestos Generales del Estado para 2011 para financiar los descuentos de residente?
Estas preguntas surgen cuando, con datos objetivos que demuestran que los menorquines pagan el doble -o más- que los mallorquines por viajar a Barcelona, Madrid o Valencia, se comprueba que políticos, empresarios y aerolíneas coinciden al reconocer que es "complicado" resolver la problemática del transporte aéreo en Menorca, al tratarse, simple y llanamente, de una cuestión derivada de la ley de la oferta y la demanda. O lo que es lo mismo, que por vivir en una Isla que despierta menos interés comercial -por no mover a tantos viajeros como un gran aeropuerto como el de Son Sant Joan-, sus habitantes están abocados a tener que pagar el oro y el moro para salir, en muchas ocasiones por motivos de fuerza mayor, de este pequeño pedazo de tierra que es Menorca.
Resignación
Desde la compañía Spanair, su responsable de comunicación, Carles Fernández, explicó ayer que las tarifas son muy cambiantes en función de la ocupación de los vuelos, las ofertas, la antelación con que se realice la compra del billete, los horarios y las fechas en que se viaje, así como la competencia que existe para esa determinada ruta aérea. Además de estos criterios que resumen la ley de la oferta y la demanda, según añadió Ana Fernández desde Vueling, las operadoras tienen en cuenta "otros factores" en función de cada ciudad o aeropuerto con el que se conecta.
Tanto el conseller de Movilidad, Damià Borràs, como el presidente del Partido Popular en Menorca, Santiago Tadeo, el secretario general de PIME-Menorca, Pau Seguí, y el gerente de CAEB (Confederación de Asociaciones Empresariales de Balears), Josep Fortuny, coincidían ayer al resumir el problema en que se trata de un tema enmarcado en el libre mercado en que cada empresa establece el precio de su producto.
Ésta es una situación que se ampara en la poca competencia existente y que hace que las compañías no necesiten entrar en una guerra de precios para disputarse los clientes. La pescadilla que se muerde la cola. Ante eso, podría compensarse a menorquines, eivissencs y formenterers bonificándolos con un mayor descuento que el de quienes disfrutan de precios más competitivos.
Balears, con las bonificaciones de Canarias
El presidente del Govern, Francesc Antich, anunció ayer que Balears disfrutará también la mayor parte de las bonificaciones al transporte aéreo que Coalición Canaria consiguió del Gobierno al negociar el apoyo de la formación a los Presupuestos Generales para 2011.
Así, según Antich, Balears se equiparará a Canarias en la congelación de la tasa del transporte de pasajeros, la "más importante" y la que "significa más dinero". De igual modo, se aplicará en el archipiélago balear la bonificación que habrá en el canario para las aerolíneas que aumenten el número de pasajeros transportados en relación al año anterior, y se les rebajarán las tasas al 50 por ciento a las que incrementen frecuencias y abran nuevas rutas con Menorca y Eivissa.
Por otro lado, la consellera balear de Turisme, Joana Barceló, informó ayer que el Govern ha conseguido incrementar en 30 el número de conexiones internacionales en las Islas, 22 durante la temporada alta y 8 en baja. De ellas, para Menorca se han logrado los vuelos a París y Varsovia este verano pasado y a Londres para invierno. Además, para 2011 se prevé un enlace con Roma.
Más trabajo del Govern y dar mayor atractivo
Desde CAEB, Josep Fortuny recordó que en 2008, en la mesa de economía en el marco del Pacto por la Competitividad, se acordó que el Govern instaría al Ministerio de Fomento a que declarara el servicio público para las conexiones de Menorca con la Península, algo que serviría para "sentar las bases en cuanto a frecuencias y precios". Por eso, Fortuny cree que "es trabajo del Govern" defender esa alternativa, ya que "las compañías no programarán más vuelos si no les sale rentable". En ese contexto, señaló que otra opción sería crear una compañía mixta pública y privada como existe en Canarias, algo que reconoce complicado teniendo en cuenta la crisis actual.
Por su lado, desde el PP, Santiago Tadeo también ve difícil combatir la ley de la oferta y la demanda, por lo que una solución es "hacer más atractiva Menorca" para generar más demanda. Contra eso, asegura Tadeo, está contribuyendo la política del Consell, que se opone a "cualquier iniciativa privada de inversión en la Isla". Como ejemplo, la negativa a "crear una bodega de diseño en la finca de Torralbenc Vell". Una política que "ha empobrecido Menorca" y ha "incrementado el coste de la insularidad".