La figura de Dick Oatts parecía tener poco tirón en el cartel del "Menorca Jazz", tapada por otros artistas más conocidos, pero al final se reveló como uno de los platos más interesantes del festival en compañía del trío liderado por el pianista canario José Alberto Medina. Al final resulta que el saxofonista americano cuenta con una notable historia de colaboraciones a sus espaldas, algunas de ellas con figuras de la importancia de Ella Fitzgerald, Sara Vaughn o Milton Nascimento. Y eso deja huella.
A Oatts se le ve cómodo experimentando con nuevas formaciones, y prueba de ellos es esta gira en la que se ha embarcado con el JAM Trío después de que coincidieran hace un tiempo en la Big Band de Canarias. El experimento funciona y la colaboración irá más allá de unos cuantos conciertos, ya que en pocos días tienen planeado meterse en el estudio para sumergirse en la grabación de un álbum con temas inéditos aportados por ambas partes. Esas canciones son las que en mayor parte sonaron en la noche del viernes en el Teatre del Casino Nou de Ciutadella, en lo que fue un concierto con un marcado tono de ensayo general pero igualmente disfrutable.
Tras dos tríos de contrabajo, batería y piano en las dos últimas citas del festival, apetecía ya escuchar algún instrumento más, y ahí entró en juego el saxo alto de Oatts, quien se empleó a fondo durante el concierto, se escondió cuando no le tocaba protagonismo, no pronunció ni una sola palabra en toda la noche -ni falta que hizo- y sonrió lo justo. Quien se encargó de las labores de maestro de ceremonias fue el pianista canario, compositor del tema que mejor sonó en el concierto de clausura del "Menorca Jazz", "Mr. Dick", homenaje al saxofonista cuya inspiración nació de una colaboración entre ambos en el museo Guggenheim. Sin duda fueron las mejoras notas de la noche, con un solo de piano que condujo a una larga pieza en la que todos tuvieron su momento, incluidos los músicos argentinos Paco Weht (contrabajo) y Mariano Steimberg (batería).
Punto final
Así se inició el tramo final de un concierto que ganó enteros a medida que pasaban los temas, entre los que figuraron títulos tan originales como "Top Mantra". Un escueto bis con una única pieza, "King Henry", se encargó de poner el broche final a un festival que en su última noche contó con menos público del habitual pero dejando muy buen sabor de boca, el mismo que le quedó al director del festival, Ignasi Mascaró, quien se mostró muy satisfecho con el nivel de la edición de este año.