El delegado del gobierno en las Illes Balears, Ramón Socías, ha acusado este miércoles al PP de haber impuesto una doble condena a los presos menorquines: "la penal y la territorial", mientras que la alcaldesa de Maó, Águeda Reynés, ha criticado los "déficits sociales" de la nueva cárcel de Menorca inaugurada esta mañana, debido a que "no cuenta" con el consenso de los vecinos.
Así, pese a comprometerse a apoyar a la dirección del centro, Reynés ha recordado que hace 15 años se pactó la instalación de un centro de reinserción en la isla y no de una prisión, que, a su juicio, "no se ha desarrollado de forma transparente y con diálogo. Además, ha censurado que el nuevo centro penitenciario se sitúa en el margen de una de las carreteras más transitadas de la isla, haciendo referencia así a la posible mala imagen que pueda dar el recinto.
Por su parte, el delegado del gobierno ha lamentado que la alcaldesa de Maó haya aprovechado el acto para hacer partidismo: "por desgracia, el acto ha quedado deslucido por la intervención de Reynés, que ha huido del protocolo con una intervención que no tenía nada de institucional y ha aprovechado para seguir con una campaña que se ha llevado a cabo en los últimos años por parte del PP contra este centro penitenciario".
"Debo recordarle que si hace 15 años se empezó a hablar del proyecto, durante los ocho que gobernó el PP, el Gobierno no movió un dedo para que este centro fuera una realidad y, mientras tanto, centenares de menorquines tuvieron que cumplir sus condenas lejos de su casa", ha reprobado.
Además, Socías ha invitado a los políticos 'populares' a "revisar su actitud cuando se les invita a actos" y ha respondido a las críticas por falta de consenso con un envite: "les invito a que piensen en cuántas instalaciones hemos sufrido en nuestra comunidad autónoma que no han contado con el consenso social y político necesario, como el Palma Arena".