El tráfico marítimo volvió ayer a la normalidad con la reapertura de los puertos menorquines, después de que la Dirección General de Interior, Emergencias y Justicia redujera el nivel de riesgo vigente en la Isla del Índice de Gravedad 1 a 0.
Las fuertes rachas de viento que azotaron Menorca en la jornada del viernes, que alcanzaron en algunos momentos hasta los 90 kilómetros por hora, y el peligro de fenómenos costeros adversos, obligaron a decretar la alerta y a la cancelación de las rutas marítimas.
Las condiciones meteorológicas mejoraron ayer y Autoridad Portuaria de Balears (APB) informó de la apertura al tráfico del puerto de Maó a partir de las 6 de la mañana, cuando la velocidad del viento se situó por debajo de los 60 nudos (unos 60 kilómetros por hora), el límite permitido para que la navegación sea segura.
Asimismo, los barcos entraron ayer sin problemas en el puerto de Ciutadella, que también recobró el tráfico normal, después de que el viernes las dos compañías que operan en el dique, Baleària e Iscomar, se vieran obligadas a suspender los trayectos con el puerto mallorquín de Alcúdia a causa del fuerte oleaje en el canal.
Según las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología, el viento soplará hoy de noroeste, flojo con intervalos de moderado, sin que se alcance un nivel de riesgo. Sin embargo, el organismo informa de que el tiempo volverá a empeorar mañana lunes con el riesgo de fenómenos costeros.
Desde el pasado jueves la Isla ha padecido las consecuencias del temporal que, si bien no ha producido incidentes graves, en el mar ha provocado olas de hasta 6 metros de altura.